Uno de los jugadores de moda en el inicio de la temporada estaba siendo Takefusa Kubo, que consiguió llamar la atención de los mejores equipos del planeta con sus actuaciones. Y aunque en las últimas jornadas haya bajada ligeramente sus prestaciones, probablemente víctima del cansancio acumulado en las piernas, ha seguido rindiendo a un buen nivel, y demostrando porqué es una de las piezas clave de la Real Sociedad.
La excepcional campaña que están firmando los vascos no se entiende sin el ex del Villarreal, del Getafe o del RCD Mallorca, que es el líder del ataque, por delante incluso de Mikel Oyarzabal. Tiene una facilidad increíble para marcar las diferencias con la visión de juego y la calidad individual que atesora, y lo mejor de todo es que solamente tiene 22 años. Por lo tanto, aún dispone de un notable margen de progresión, y puede mejorar una barbaridad.
Y tiene pretendientes de lujo que intentarán sacarlo de Anoeta en el siguiente mercado estival, como el Manchester United, el Arsenal, la Juventus de Turín, el Paris Saint-Germain o el Liverpool. Tiene una cláusula de rescisión muy asumible, de 60 millones de euros, que cualquiera de sus admiradores puede pagar prácticamente sin ningún tipo de inconveniente. Pero el destino más probable para el internacional japonés sigue siendo el Real Madrid.
Aunque se ha dejado de hablar sobre esta posibilidad en las últimas semanas, Florentino Pérez sigue teniendo muy bien posicionado en la lista de objetivos a Take. Hay que recordar que pasó por el Santiago Bernabéu, pero sin llegar a debutar en partido oficial con el primer equipo, y que se reservaron el 50% de una futura venta cuando lo traspasaron al combinado ‘txuri urdin’. Por lo tanto, solamente costaría 30 ‘kilos’ recuperarlo.
Podría reforzar el ataque, la zona que más dolores de cabeza está generando a Carlo Ancelotti por los pocos efectivos que tiene a su disposición, y por las numerosas lesiones que se han producido.
El Barça se queda en fuera de juego por Kubo
Asimismo, el Barça también era colocado siguiendo los pasos de Kubo, que pasó varios años en La Masía, antes de regresar a su país natal por culpa de la sanción de la FIFA. Pero Florentino Pérez se aseguró incluir una cláusula para impedir que Take pueda llegar al Camp Nou.
De modo que para Joan Laporta tendría un coste más elevado que para el resto de interesados en la subasta.