Como ya sucedió el verano pasado, al Barça le tocará sudar sangre para dar salida a los jugadores que no entran en los planes de Xavi Hernández. Las elevadísimas cifras concedidas por la junta directiva de Josep Maria Bartomeu a los jugadores provoca que ninguno logre contratos parecidos fuera del Barça, por lo que todos se quieren quedar. Y uno de los casos que más preocupan es el de Lenglet. El central francés, que no entra en los planes de Xavi, cobra 10 millones de euros al año y tiene contrato hasta el 2026, por lo que puede quedarse cuatro temporadas más en el Barça si así lo decide.
El Barça le está buscando una salida, aunque sea como cedido, pero de momento parece complicado. El Sevilla, exclub de Lenglet que este verano se va a quedar sin su pareja de centrales titular, Koundé y Diego Carlos, es el club más interesado, aunque Monchi no tiene la más mínima intención de igualar la ficha que tiene ahora en el Barça.
Casos complicados
Y el problema es que Lenglet es solo la punta del iceberg. En la lista aparecen Neto, Dest, Umtiti, Pjanic o Braithwaite, futbolistas que Xavi Hernández quiere fuera de la plantilla y que están poniendo inconvenientes para salir del Camp Nou. Todos ellos consideran que merecen más oportunidades de las que han tenido y aluden a sus contratos, lo que dificulta muchísimo buscarles un club que jamás le igualará el salario actual. Neto, que sabe que seguirá sin jugar, no le cierra la puerta a irse, pero ya en el mercado de invierno rechazó dos ofertas para salir.
El caso más fácil, a priori, es Dest, que tiene una oferta del Manchester United. Xavi Hernández se lo quedaría, como suplente, pero las necesidades del Barça invitan a vender al norteamericano, que no es imprescindible para el entrenador de Terrassa. Dest se irá si el Manchester United decide tirar hacia adelante en su decisión de ficharlo.
Riqui Puig y Mingueza, en la rampa de salida
Más complicados son los casos de Umtiti, Pjanic y Braithwaite. Ninguno de los 3 se quiere. El central francés ya ha demostrado en varias ocasiones que no tiene ningún problema en seguir viviendo en Barcelona sin jugar. El bosnio ve una oportunidad de ser importante con Xavi, pues cuando él se fue el entrenador era Koeman. Braithwaite, por su parte, tiene la vida resuelta por su éxito con los negocios fuera del fútbol, por lo que ya ha comunicado que quiere cumplir su contrato con el Barça.
Por otro lado, Riqui Puig y Mingueza ya saben que deben salir, aunque se les propone cesiones con opción de volver al Barça y rinden con éxito. Ambos canteranos aceptan la situación, que se resolverá durante el verano, que será muy movido en las oficinas del club blaugrana.
Imagen principal: Xavi Hernández, entrenador del Barça, en un partido del Camp Nou / EFE