Con o sin el mejor coche, Max Verstappen no tiene rival. El neerlandés de Red Bull se ha proclamado campeón del mundo de F1 por cuarta vez consecutiva, esta vez, mereciéndose más que nunca el reconocimiento. 2024 ha sido la temporada en que la hegemonía de la marca de las bebidas energéticas ha llegado a su fin, pero ni con estas, Lando Norris ha estado cerca de dificultarle el alirón.
El ecuador de la temporada prometía una segunda mitad de curso ajustadísima, pero Verstappen, minimizando daños fin de semana tras fin de semana, sacando los codos cuando ha tenido que hacerlo y, en algunos casos, sobrepasando los límites de la legalidad, ha demostrado que ni el inglés de McLaren ni nadie puede hacerle sombra.
Verstappen se mete en el club de tetracampeones con Alain Prost y Sebastian Vettel
Aparte de Michael Schumacher y Lewis Hamilton y sus 7 títulos y de Juan Manuel Fangio y sus 5, Max Verstappen ya forma parte de club de tetracampeones junto con Alain Prost y Sebastian Vettel. El neerlandés, a sus 27 años, suma cuatro títulos consecutivos, sellando los tres primeros con un coche incontestable, pero este cuarto con una superioridad al volante que le hace campeón de manera más merecida que nunca.
McLaren ha tenido muchas oportunidades para dar un puñetazo sobre la mesa, pero ni el equipo naranja ha sido el consistente en que requiere la Fórmula 1 ni Verstappen es un piloto que iba a dar su brazo a torcer. Todo el mundo en la parrilla sabe como de cara se vende la piel del ya tetracampeón, pero es que, aparte de la diferencia de manos con Lando Norris, a nivel mental, no hay color.
Verstappen ha demostrado ser una bestia en el pasado, denotando también carencias bajo presión, pero este año, incluso viéndose entre la espada y la pared prácticamente desde Miami, no ha habido manera de acercarse al trono del absoluto rey de la Fórmula 1 a día de hoy.
Verstappen y Las Vegas, una comedia con final feliz
La historia entre Verstappen y Las Vegas ni mucho menos empezaba de buena manera. "Te sientes un payaso" o "definitivamente he corrido en mejores pistas en mi carrera" fueron algunas de las perlas que soltó el de Red Bull antes del Gran Premio de 2023. Sin embargo, al ganar la carrera, Verstappen clamaba a los cuatro vientos por radio un "viva Las Vegas".
Fuera ironía o fuera simplemente una broma, está claro que la comedia ha acabado con un final feliz para él. El cuarto Mundial, el más difícil de su carrera, ha llegado a la ciudad que nunca duerme, de donde tenía una referencia fatal respecto a la faceta deportiva, pero de la que, ya para siempre, recordará como un lugar mágico. Además, proclamarse campeón en Las Vegas es el lugar propenso para celebrarlo. De hecho, ya con el Mundial en el bolsillo, Verstappen ha pedido "traedme algo de beber". Simplemente Max Verstappen.