Las hazañas conseguidas por el Real Madrid durante la pasada temporada harán que la decimocuarta Champions League de la historia merengue sea recordada con mucho amor por los aficionados madridistas. Levantar el trofeo de la competición más importante del continente en el ámbito de clubs tuvo todavía más mérito después de que los hombres de Carlo Ancelotti protagonizaran tres remontadas inverosímiles entre los octavos de final y las semifinales.

Además, el madridismo saca pecho después de coronarse campeones de la Liga Santander sin ningún tipo de oposición después de que el Barça y el Atlético de Madrid atravesaran varios altibajos de rendimiento. Sea como sea, el éxito de la última temporada del conjunto madrileño fue fruto de la emergencia de nombres propios. Innegablemente, el hombre que abanderó el equipo en todo el transcurso del curso fue Karim Benzema, pero el francés no se hubiera podido destacar como máximo goleador de la Liga y de la Champions si no hubiera sido por el óptimo estado de forma del que fue su mejor socio: Vinícius Junior. Sin embargo, en el fútbol no todo es marcar goles, ya que si te marcaran más no serviría de nada. Eso era tarea de Thibaut Courtois, quien ya hace un tiempo que se mantiene en su mejor momento y fue uno de los grandes puntos de apoyo por los cuales el Madrid consiguió lo que consiguió.

Thibaut Courtois, haciendo una de los mejores paradas de la final de la Champions entre Real Madrid y Liverpool / Foto: EFE

Thibaut Courtois, el muro de las lamentaciones de los delanteros

El portero belga fue la bendición del equipo blanco durante la pasada temporada. En la Liga solamente se perdió dos partidos, pudiendo disputar un total de 3.240 minutos. Además, mantuvo un excelente coeficiente de goles encajados por partido de 0,81, solamente superado por Yassine Bounou, exportero del Girona y actual futbolista del Sevilla.

De añadida, su recital de milagros en la Champions League lo catapultaron a la historia de los hombres que juegan el partido debajo de los palos. Un total de 59 paradas fueron suficientes para evitar que se fraguasen gestas como contra el Paris Saint-Germain en los octavos, contra el Manchester City en las semifinales, o en la misma final ante el Liverpool, donde una mano salvadora evitó la igualada de Mohamed Salah.

Courtois, durante uno de sus vuelos durante la final de la Champions contra el Liverpool / Foto: EFE

Quien algo quiere, algo le cuesta

Thibaut Courtois llegó al Real Madrid en el verano del año 2018 proveniente del Chelsea. Florentino Pérez pagaba 35 millones de euros cuando el portal web transfermarkt.es lo tasaba en 65. Una auténtica ganga, que con los años, reafirmaría la oportunidad de mercado que el club aprovechó con él.

Sin embargo, quien algo quiere, algo le cuesta. Durante el mes de agosto de 2021, el presidente ya renovó al gigante belga con el fin de blindar a uno de los mejores activos de la plantilla de entonces. Sea como sea, Courtois ha respondido mejorando su nivel aún más. Ha vuelto a pedir un aumento salarial y Florentino no se lo puede negar. Si incluso en pretemporada, el portero de 30 años no deja de ser el héroe de los blancos. Recordamos que la victoria del Barça en el Clásico de Las Vegas podría haber sido mucho más abultada si no hubiera sido por la actuación del dorsal '1' del Real Madrid.