El Real Madrid ha encarrilado una victoria cómoda contra la Valencia (4-1) gracias a un penalti inventado que ha facilitado mucho las cosas y ha dejado sin reacción a los valencianos. Un doblete de Benzema y otro de Vinícius han sellado una victoria merecida pero polémica para afianzar el liderato en la Liga Santander.
Hernández Hernández, cómplice del Madrid
Aunque los futbolistas dirigidos por José Bordalás han entrado con más decisión al partido que los blancos, el despiste de los merengues no ha llegado ni a los 10 minutos, momento en que el Madrid ha empezado a ejercer de líder de la liga. Las llegadas al área que defendía el exblaugrana Cillessen eran constantes, y todos los que estaban presenciando el partido tenían la sensación de que el primer gol era cuestión de minutos.
Lo habría podido conseguir Marco Asensio, pero Cillessen se lucía para evitarlo. Unos minutos más tarde, concretamente en el 40, ha sido el larguero quien ha impedido que el Madrid se pusiera por delante, interponiéndose en un auténtico misil de Luka Modric que se ha quedado a centímetros de marcar un golazo.
Al Valencia le quedaban menos de cinco minutos para mantener el empate al descanso y replantear el partido en la reanudación, pero en una aventura individual de Casemiro en campo contrario, el brasileño ha comprado lotería dejándose caer dentro del área, el árbitro Hernández Hernández le ha comprado todas las papeletas y ha regalado un penalti que Benzema no ha desperdiciado para inaugurar el marcador. Es de aquellos penaltis que muchos calificarían de dudoso, y cuando eso pasa, es un eufemismo para no decir que no era penal.
El Valencia se anima tarde
Al Valencia le ha cambiado el guion que tenía pensado para los segundos 45 minutos, y ha bajado demasiado pronto los brazos. Ha empezado la segunda parte siendo un espejismo de como había empezado la primera y Vinícius se ha aprovechado de la pasividad defensiva de los ché para marcar el segundo en el minuto 52.
Quedaba mucho partido por delante, pero los valencianos se han visto incapaces y el Madrid lo ha aprovechado para cerrar el partido antes de tiempo. Cuándo nada más se había jugado una hora de fútbol, nuevamente Vinícius marcaba, esta vez a placer, sin ningún tipo de oposición, convirtiendo en gol una parada de Cillessen a un disparo de Asensio.
Con el 3-0 y todo perdido, el Valencia ha empezado a jugar sin presión, y Daniel Wass ha avisado un par a veces con su gran lanzamiento lejano, y han encontrado el premio del gol. Un penalti claro (este sí) de Mendy sobre Marcos André ha servido a Guedes para recortar distancias. Courtois ha detenido el primer lanzamiento, pero le ha vuelto a caer el rebote al portugués, que no ha perdonado con la cabeza. Y todavía se habría podido animar el final del partido si Wass o Manu Vallejo hubieran convertido alguna de las ocasiones que han tenido, pero quien no ha perdonado ha sido Benzema, que ha marcado su doblete particular para finiquitar el partido con el resultado definitivo.