Nadie tiene dudas acerca del futuro de Dani Ceballos. Está bastante claro que deberá de abandonar el Real Madrid, ya que no entra en los planes de Carlo Ancelotti, y no parece haber negociaciones para renovar su contrato, que expira en 2023. Así pues, se marchará en verano, y se dice que le han colocado un precio cercano a los 15 millones de euros. Una cifra que esperan que varios equipos paguen, con el Real Betis como el gran favorito para acogerle.
El internacional español llegó hace cinco años, como una apuesta de futuro, y Florentino Pérez estaba convencido de que sería una alternativa fiable a Luka Modric y a Toni Kroos. Sin embargo, la realidad es que nunca ha conseguido asentarse, y Zinedine Zidane le relegó al ostracismo, debido a que mantenía una relación personal pésima con él. Una situación que no mejoró con la presencia de Julen Lopetegui ni Santiago Solari en el banquillo.
Se marchó a préstamo durante dos campañas en el Arsenal, pero allí tampoco consiguió triunfar, y esta campaña regresó al Santiago Bernabéu, con la esperanza de dar un golpe sobre la mesa. No obstante, ha seguido teniendo un papel secundario, y las lesiones tampoco le han ayudado mucho. Tan solo acumula 75 minutos sobre el terreno de juego, divididos en siete partidos, ninguno de ellos como titular, y ha sido capaz de dar una asistencia.
Ceballos siempre ha reiterado que su deseo era triunfar en el Madrid, una cosa que no ha sido capaz de conseguir. Se irá cuando llegue una propuesta interesante, aunque ahora se especula con la posibilidad de que entre en un cambio de cromos, para abaratar el coste de un objetivo de fichaje. Se trata de Aurelien Tchouameni, que está en la lista de prioridades, y al que quieren llevarse del AS Mónaco. Es el elegido para hacer olvidar a Casemiro, otro que tiene pie y medio fuera.
Las destacadas actuaciones del internacional francés no han pasado desapercibidas, y es un futbolista del total agrado de Ancelotti, que ya ha dado el OK a su posible fichaje.
20 ‘kilos’ y Ceballos, la propuesta del Madrid
El ex del Girondins de Burdeos quiere marcharse del Stade Louis II, y estaría encantado con la posibilidad de vestir de blanco. Se dice que los monegascos pedirían una compensación económica de entre 50 y 60 ‘kilos’, una cifra que Florentino Pérez no quiere pagar. Y la oferta que tiene en mente es de 20 millones, más los servicios de Ceballos.
Habrá que ver si aceptan, y sobre todo, si el centrocampista nacido en el año 1996 también quiere marcharse a El Principado.
Allí podría compartir vestuario con Cesc Fábregas, uno de sus ídolos.