El Barça tiene un objetivo entre ceja y ceja para esta última semana de mercado de fichajes. Aparte de poder cerrar alguna otra incorporación para reforzar posiciones necesitadas como el mediocampo, el extremo izquierdo o los laterales, el club blaugrana tiene que solucionar cuanto antes el caso Dani Olmo. De hecho, su voluntad es resolverlo antes de este próximo martes, para que el egarense pueda debutar contra el Rayo Vallecano. Se esperan cerca de más de 24 horas frenéticas, con la directiva de Joan Laporta trabajando a contrarreloj para que no se repita la imagen de su fichaje estrella sentado en las graderías sin poder pisar el verde, tal como sucedió el pasado sábado en Montjuic contra el Athletic Club.
Las opciones del Barça para poder inscribir a Dani Olmo
Encima de la mesa, el Barça tiene varias opciones para poder acelerar la inscripción de Dani Olmo. La primera de ellas, el acuerdo con WhitBIT, que entraría a formar parte del accionariado de Barça Vision y que supondría una sustancial inyección económica para el club. La cúpula culé sigue trabajando para cerrar este movimiento, pero tiene otras opciones sobre la mesa. Las últimas informaciones indican que la junta de Joan Laporta estaría valorando presentar un aval personal para cubrir la deuda que la Liga exige que esté saldado para volver a la normalidad financiera.
Esta fórmula, sin embargo, sería la última alternativa que estudia al Barça. Primero tiene que ver si con las salidas de Mika Faye al Rennes, Alex Valle en el Celtic de Glasgow, Vitor Roque en el Betis y Clément Lenglet al Atlético de Madrid es suficiente para generar el espacio necesario en la masa salarial de la plantilla para meter la ficha de Dani Olmo. Esta sería la situación idílica para el conjunto barcelonés, pero ahora mismo parece complicado que los números cuadren solo con estos movimientos. Hay que recordar que Laporta ya avaló para inscribir a Jules Kounde el año 2022 e Iñigo Martínez el año pasado.
El Barça, pendiente de la operación con Nike
En cambio, lo que solucionaría de una tacada todos los problemas económicos del Barça, al menos a corto plazo, es cerrar el acuerdo con Nike. Desde hace varios meses, el club barcelonés está negociando con la marca americana para sellar un contrato que convertiría la camiseta blaugrana en la mejor pagada del mundo. Este acuerdo sería de 10 años y serviría para entrar de una vez por todas en la normativa de l'1:1 del fairplay financiero e incluso poder aspirar a algún otro fichaje.
En este sentido, los nombres que están sonando más reforzar la plantilla de Hansi Flick antes del viernes son Federico Chiesa y Marc Pubill, que llegarían con un coste bisiesto reducido, sin superar los 15 millones de euros en ningún caso. Así pues, se esperan horas de mucho trabajo para la directiva de Laporta, que tendrá que volver a hacer malabares para cerrar de la mejor forma posible un mercado que ha despertado muchas críticas.