Con problemas para inscribir a sus futbolistas y con aspiraciones todavía por satisfacer en el mercado, el FC Barcelona estaba llamado a vender con el fin de generar ingresos y desbloquear estas situaciones. De la plantilla de Xavi Hernández, la nómina de extremos era una de las zonas señaladas a reducir su número de integrantes, siendo Abde, Ansu Fati y Ferran Toreres futbolistas que han sonado insistentemente para salir del Camp Nou.

Dembélé, a priori, era el único intocable de todos ellos, pero el francés traicionó al Barça cuando se había confiado en su palabra y, con su deserción, el potencial ofensivo de la plantilla culé ha quedado seriamente reducido. Ahora, con un futbolista menos en el bloque de ataque, a priori, se habían descartado más ventas, pero, recuperando el caso de Raphinha y la posible 'palanca' que podría significar su salida, la entrada de Deco al cargo de director deportivo blaugrana ha reforzado sus posibilidades de continuidad.

Joan Laporta y Deco, en el anuncio del brasileño nacionalizado portugués como nuevo director deportivo del Barça / Foto: FC Barcelona

Deco blinda la figura de Raphinha

Durante este mercado estival, se había hablado mucho de que Raphinha tenía una buena reputación en la Premier League y que estaban llegando ofertas de hasta 80 millones de euros por él, pero el jugador tenía claro que quería seguir vinculado al Barça y, aunque el club contemplaba su salida por una cantidad parecida, acabó desestimando la opción. No obstante, la entrada del directivo brasileño nacionalizado portugués al organigrama del FC Barcelona ha acabado de disipar posibilidades de venta.

Deco, agente de Raphinha antes de vender su agencia de representación para llegar al cargo que desde este miércoles ocupa, incidió en la llegada del extremo brasileño al Barça, desestimando ofertas incluso más importantes económicamente como lo fue la del Chelsea.

Raphinha, durante un partido del Barça / Foto: EFE - Toni Albir

Un inicio de temporada opuesto a lo que necesita el Barça

Después de cerrar la pasada temporada con buenos números, marcando 10 goles y repartiendo 12 asistencias en los 45 partidos que disputó entre todas las competiciones, la salida de Dembélé lo obliga a dar un paso adelante, haciendo de estas estadísticas un punto de partida para ser todavía más importante este curso.

No obstante, el inicio de temporada del extremo ha sido totalmente opuesto a lo que necesita el Barça de él. Raphinha, que fue el único jugador que cayó en las constantes provocaciones del Getafe, vio la tarjeta roja en el minuto 42 después de haber visto la primera tarjeta amarilla en el 38'. De esta manera, no solo dejó al Barça con un jugador menos, sino que obliga los suyos a dejar de contar con él para los próximos dos partidos.