La portería del FC Barcelona ha vivido una temporada atípica. Marc-André ter Stegen, el titular indiscutible en los últimos años, ha estado gran parte de la campaña lesionado, lo que obligó a Iñaki Peña a asumir la titularidad. Sin embargo, el canterano no convenció a Hansi Flick, y el club recurrió a una solución inesperada: fichar a Wojciech Szczęsny, quien salió del retiro para reforzar al equipo.
Ahora, con la recuperación de Ter Stegen en marcha, la planificación de la próxima temporada ya está definida. Deco y la dirección deportiva han decidido que el tercer portero será Diego Kochen, una de las grandes promesas de la Masia. Flick ha dado su visto bueno, lo que significa que el estadounidense formará parte del primer equipo en la 2025-26, mientras que Iñaki Peña será traspasado y Ander Astralaga saldrá cedido.

Un relevo asegurado en la portería azulgrana
La decisión de apostar por Kochen no es casualidad. El joven guardameta, de origen estadounidense, ha demostrado un gran potencial en las categorías inferiores y cuenta con la confianza del cuerpo técnico. Con Ter Stegen como titular y Szczęsny como suplente, la idea del Barça es que Kochen se desarrolle en un entorno de élite y gane experiencia entrenando con los mejores.
La salida de Iñaki Peña parece inevitable. Después de varias temporadas como suplente y sin haber aprovechado del todo la oportunidad que tuvo con la lesión de Ter Stegen, el club considera que lo mejor para ambas partes es una venta. Hay interés de varios equipos de LaLiga y del extranjero, por lo que su futuro se definirá en los próximos meses.
Szczęsny, el veterano que garantizará seguridad
El fichaje de Szczęsny sorprendió a muchos, pero su rendimiento ha sido sólido y ha demostrado que todavía tiene nivel para competir en la élite. En el Barça están satisfechos con su profesionalismo y liderazgo, por lo que se espera que cumpla el rol de segundo portero la próxima temporada, asegurando una alternativa de garantías en caso de que Ter Stegen no esté disponible.

Con esta planificación, el Barça busca estabilidad en la portería y, al mismo tiempo, preparar el futuro con Diego Kochen como apuesta a largo plazo. Si su progresión sigue el camino esperado, el joven estadounidense podría convertirse en el heredero de Ter Stegen en los próximos años. El club ya ha tomado su decisión y Flick ha dado su visto bueno.