No todos en el Barça consideraron a principios de verano que fuera una buena idea renovar a Ousmane Dembélé. El jugador, empujado por su representante, se había enfrentado al Barça, amenazado con irse, además de que sobre el terreno de juego seguía sin demostrar nada. Xavi Hernández, sin embargo, apostó fuerte por el francés y el Barça le hizo caso, olvidó las rencillas y le firmó la renovación. Ahora, a las puertas del otoño, ya pocos en el Barça dudan que la continuidad de Dembélé ha sido un acierto. El francés forma, junto a Lewandowski y Raphinha, un tridente temible, al que se puede añadir Ansu Fati en un futuro.

La nueva situación, sin embargo, deja damnificados. El Barça necesita ingresos para poder fichar los nuevos refuerzos que necesita la plantilla, especialmente un lateral diestro, un pivote defensivo y a Bernardo Silva, la guinda del pastel. Para ello habrá que vender jugadores y uno que está en la rampa de salida es Ferran Torres, que tras la eclosión de Dembélé y el retorno de Ansu Fati ha desaparecido del mapa.

Ferran Torres, tras fallar una ocasión en el Cádiz-Barça / Foto: EFE

Ferran Torres, de más a menos

Fichado el pasado mercado de invierno por un fijo de 55 millones de euros más variables, el extremo valenciano se ha estancado. Empezó bien, marcando goles y siendo indiscutible para Xavi Hernández. Poco a poco, sin embargo, se fue apagando, lo que provocó que la dirección deportiva decidiera reforzar los extremos. Para rematarlo, Ferran Torres se lesionó en el inicio de la pretemporada, partiendo ya en desventaja.

El resultado ha sido un Ferran Torres suplente y sin confianza que es una sombra del que deslumbró en el Valencia y en algunos momentos en el Manchester City. El Barça debe recuperar la inversión, pero sabe que nadie pondrá encima de la mesa los 55 millones de euros. El precio de salida es de 40 millones de euros.

Ferran Torres, en el Real Sociedad-Barça de esta temporada / Foto: EFE

El Arsenal quiere a Ferran Torres

De momento, el único club que parece ir en serio a por Ferran Torres es el Arsenal, que de la mano de Mikel Arteta está volviendo a ilusionar, como hacía muchos años que no ocurría. Arteta conoce a la perfección a Ferran Torres, de la etapa en la que era el ayudante de Guardiola en el Manchester City. El Arsenal le ofrece un buen salario, poder vivir en Londres y, lo que es más importante, ser una de las estrellas de un equipo que ha crecido exponencialmente gracias a los fichajes de Gabriel Jesús, Fábio Vieira, Zinchenko y Marquinhos.

Está por ver si el Barça activa la salida de Ferran Torres en este mismo mercado de invierno o se espera al verano. Todo dependerá del Mundial de Qatar, en el que se espera que Ferran Torres sea titular, de las posibles lesiones en la plantilla y del nivel de Ansu Fati. Si Dembélé sigue centrado y el canterano mejora su estado físico, el valenciano tendrá la puerta de salida del Barça abierta.