Joan Laporta está muy enfadado con Ousmane Dembélé y lo ha reiterado este martes durante la presentación de las conclusiones de la investigación "forensic", en la que ha afirmado que en el Barça la sensación es que el francés se ha negado a salir del club porque tiene un acuerdo con otro club. "Así nos lo han insinuado sus agentes", ha añadido. Y este club no es otro que el PSG, que hasta el último momento ha dificultado al máximo los intentos del Barça de ceder o traspasar a Dembélé al Chelsea o al Tottenham.

Y es que el PSG ha puesto encima de la mesa una prima de fichaje para Dembélé de 20 millones de euros, a lo que se añade una casa en París y una ficha de auténtica estrella mundial, unas condiciones que, para ser válidas, deben ir acompañadas de la llegada del futbolista libre a partir del 1 de julio.

Ousmane Dembélé, en un entrenamiento del Barça / EFE

El PSG se sale con la suya

La sensación en el Barça, pues, es que Dembélé jamás ha querido irse del club en este mercado de invierno, a pesar de que en las últimas reuniones su agente afirmó lo contrario. El plan era marear la perdiz y hacer ver que su salida era posible, cuando en realidad Dembélé lo tiene todo cerrado con el PSG. El Chelsea le ponía encima de la mesa un salario elevado, mientras que el Tottenham le garantizaba un papel primordial en la plantilla.

En esta situación, el Barça intentó llegar a un acuerdo con el PSG, que podría contar con Dembélé para el segundo tramo de esta temporada, en la que tiene opciones de luchar por la Champions, pero el club parisino no estuvo por la labor. Se limitó a ofrecer jugadores que no entran en los planes de Pochettino, sabiendo que el Barça no los podía acoger al tener su masa salarial disparada.

Xavi Hernández, junto a Dembélé / EFE

Dembélé, un problema para Xavi

Ahora falta por ver qué pasa con Dembélé, que no renovará y se irá gratis el 1 de julio. "Está ahora en la plantilla y Xavi debe trabajar el presente, pero también el futuro y si a Dembélé no lo tendremos la próxima temporada...", ha afirmado Laporta, dando a entender que es complicado que Dembélé pueda jugar demasiado en el Barça cuando tiene la mente en otro club.

Y es que Dembélé es un jugador propenso a lesionarse, por lo que un gran esfuerzo podría provocar su vuelta a la enfermería, lo que rompería su futuro contrato. En el Barça, pues, se teme que el jugador no vaya a esforzarse al máximo, para evitar una lesión, lo que acabaría siendo perjudicial para los intereses del club.

 

Imagen principal: Ousmane Dembélé, saludando a Joan Laporta / FC Barcelona