Ousmane Dembélé está siendo una de las mayores decepciones de la temporada en el panorama continental. Porque el rendimiento que ha mostrado hasta el momento en las filas del Paris Saint-Germain está muy por debajo de las expectativas que generó, y ha sido incapaz de devolver la enorme confianza que le brindaron Luis Enrique y Nasser Al-Khelaïfi. Fueron las dos personas que apostaron por su fichaje, a pesar de que no contaba con la aprobación del asesor deportivo, Luis Campos.
Y no dudaron en depositar en La Liga los 50 millones de euros que figuraban como cláusula de rescisión en su contrato con el Barça. Una noticia devastadora para Xavi Hernández, que confiaba en poder retener a un jugador al cual consideraba indiscutible en sus esquemas, y al que siempre protegió de las críticas y de las acusaciones. Gracias al técnico catalán, se convirtió en titular indiscutible, y pudo demostrar un gran nivel.
Los mejores días en el Camp Nou fueron mientras el entrenador de Terrassa estaba en el banquillo, y se ganó ser considerado como uno de los mejores delanteros del planeta. Por ello, nadie tenía dudas de que triunfaría en la Ligue1, y se convertiría en un socio de lujo para Kylian Mbappé y para Randal Kolo Muani en el ataque, con los cuales también comparte vestuario en la selección gala, así que se conocen a la perfección.
Pero la realidad ha sido muy distinta, y Dembélé no está siendo capaz de encajar en los planes de Luis Enrique. Ha pasado totalmente inadvertido en los choques que ha disputado en el Parque de los Príncipes, y la prensa le ha señalado como uno de los principales responsables de los irregulares resultados que están obteniendo. De hecho, apuntan a que muy pronto podría llegar a perder su espacio en el once inicial, si no reacciona inmediatamente.
La competencia en la parcela ofensiva del PSG es gigantesca, y ‘El Mosquito’ no es imprescindible para ‘Lucho’, a diferencia de en el Barça. Es más, se ha llegado a hablar muy seriamente de una posible venta en 2024.
Dembélé, ofrecido al Real Madrid
Al-Khelaïfi no está satisfecho en absoluto con Dembélé, y sabe que si lo coloca a la venta, tardarían muy poco en llegar las primeras ofertas, que serían mucho más elevadas del precio que tuvieron que pagar. Y Moussa Sissoko, el agente del ex del Borussia Dortmund y del Stade Rennais, no ha dudado en contactar con el Real Madrid.
Florentino Pérez quiere reforzar la delantera, y tiene la posibilidad de firmar al campeón del Mundial de Rusia. Sería un golpe letal al Barça y a Xavi.