Ousmane Dembélé sigue dando dolores de cabeza y sembrando preocupación en el Barça. Porque si no tienen suficiente con la lesión que todavía sigue arrastrando, y que le ha hecho estar de baja durante los dos últimos meses, su continuidad también es otro problema grave. De momento, la única certeza es que finaliza contrato el próximo año, en 2024, y tiene una cláusula de rescisión muy asumible, de 50 millones de euros, que ha llamado la atención de muchos equipos.

Joan Laporta y Mateu Alemany están trabajando para llegar a un acuerdo y firmar un nuevo vínculo, pero se están encontrando con muchos imprevistos. Para empezar, ‘el Mosquito’ todavía no quiere hablar sobre una renovación, y prefiere esperar a final de curso, para valorar más detenidamente todas las opciones de futuro que tiene sobre la mesa. Y lo que más preocupa en el Camp Nou es el hecho de que su agente, Moussa Sissoko, presione al internacional francés para hacer las maletas.

Saldrían ganando, al poder percibir un sueldo más elevado en otro conjunto, y además quedarse con el 50% de lo que ingresaría el conjunto culé con su traspaso. Y la lista de pretendientes que se ha interesado por la contratación del campeón del Mundial de Rusia es realmente larga. Manchester United, Chelsea, Liverpool, y en especial, el Paris Saint-Germain, ya han llamado a su puerta. Pero ahora es el Bayern de Múnich el club que lidera la subasta.

Thomas Tuchel ha pedido el fichaje de Dembélé a la directiva bávara nada más aterrizar, y pide que lo saquen del Barça. Conoce perfectamente al ex del Stade Rennais, después de coincidir durante un año en las filas del Borussia Dortmund, siendo el técnico que le llevó a convertirse en una estrella mundial. Guardan un gran recuerdo el uno del otro, y todavía mantienen una relación muy cercana, lo que podría propiciar que optara por regresar a la Bundesliga.

Thomas Tuchel/ EuropaPress

Una noticia terrible para Xavi Hernández, que ha dejado muy claro que no quiere quedarse sin el extremo de 25 años, a quien considera una pieza indispensable en sus alineaciones.

Dembélé no se cierra las puertas

Lejos de acabar con las especulaciones o de mostrar su lealtad al Barça, Dembélé no descarta marcharse al Bayern. No puede ocultar que le gustaría volver a tener a Tuchel como entrenador, y militar en un equipo que le pueda prometer aspirar a todos los títulos.

Laporta deberá de encontrar una solución para impedir que esto ocurra.