Desgraciadamente hay que lamentar otro episodio condenable durante la disputa de un evento deportivo. Ha sido durante la celebración del Gran Premio de Austria de Fórmula 1, que se ha desarrollado en el circuito de Red Bull Ring en la localidad de Spielberg, cuando varias mujeres han denunciado haber sido víctimas de agresiones y comentarios sexistas durante todo el fin de semana
Se han producido durante todo el fin de semana
El diario Der Standard habla de numerosas informaciones sobre sexismo, agresiones sexuales, comentarios homófobos y racistas desde las gradas del Gran Premio austríaco, que, en la pista, acabó viendo como Charles Leclerc veía la bandera a cuadros en primera posición.
No obstante, la bandera que hay que sacar ahora es la roja para denunciar los hechos acontecidos en las gradas del mismo circuito. Lo cierto es que no se han producido solo durante la jornada del domingo, y como la Fórmula 1 ya estaba sobre aviso de lo sucedido el viernes y el sábado, publicó antes de la carrera un comunicado diciendo que este tipo de comportamiento, denunciado por varias personas, es "inaceptable" y "no será tolerado". Pese a ello, la policía local aseguró, según la agencia de noticias austríaca APA, que no recibió queja formal alguna al respecto.
"Vamos a hablar con aquellas personas que nos han informado de estos incidentes. Nos tomamos el asunto muy en serio", señaló la Fórmula 1 en su nota, emitida en sus redes sociales. A lo largo del fin de semana, numerosas personas denunciaron en Twitter que fueron víctimas de agresiones verbales de contenido sexual, homófobo y racista.
La mayoría, entre los aficionados de Max Verstappen
Algunos de ellos, sobre trabajadoras, como en este caso. "La chica que vende helados (o sea, trabaja), es acosada todo el tiempo por hombres mayores borrachos. Es terrible", explicó una usuaria en Twitter. Según la información publicada por la prensa austríaca, parte de estos incidentes se produjeron cerca del sector en el que había muchos seguidores neerlandeses de Max Verstappen (Red Bull), actual líder en la clasificación de F1, que teñían de naranja buena parte del circuito.
El piloto neerlandés fue preguntado por estos hechos, pero no quiso desarrollar mucho su respuesta, aunque fue tajante. "Eso no está bien. He leído un par de cosas, unas cuantas cosas chocantes. Una persona normal, no debería hacer estas cosas", lamentó el vigente Campeón del Mundo. "La gente está de fiesta, toman alcohol. A veces cuando bebes alcohol haces cosas estúpidas, pero esto no debe ser una excusa", concluyó el piloto de Red Bull.