El Barça actualmente solo dispone de Pierre-Emerick Aubameyang para el puesto de delantero centro. El internacional gabonés aterrizó totalmente libre el pasado mes de enero, y ha rendido por encima de las expectativas, si bien es cierto que en las últimas semanas ha bajado un poco su nivel. Y no conviene olvidar que ya tiene una edad avanzada, cumplirá los 33 años en junio, y que es impredecible. Porque ha demostrado, a lo largo de su carrera, tener poca disciplina.
Por ese motivo, Joan Laporta busca a otro goleador, pues el resto de alternativas en la plantilla no son lo suficientemente convincentes. Martin Braithwaite y Memphis Depay han demostrado no tener el nivel para ser de ayuda, y de hecho ambos son firmes candidatos a hacer las maletas. Especialmente llamativo es el caso del internacional holandés, que aterrizó hace solamente un año, y fue presentado como un refuerzo estrella, pues Ronald Koeman estaba convencido de que iba a triunfar.
La realidad ha sido muy distinta, pues su nivel ha dejado mucho que desear, si bien es cierto que comenzó con mucha fuerza, y que durante sus primeras semanas impresionó a todos. Hoy por hoy, es suplente habitual, y no entra en los planes de Xavi Hernández. Eso, unido al hecho de que finalice contrato en 2023, ha provocado que piensen en su venta, para poder obtener una importante cantidad de dinero con su salida.
El problema es que desde el Camp Nou no han encontrado alternativas mucho más fiables. Los grandes objetivos del presidente, Erling Braut Haaland y Robert Lewandowski, están cada vez más lejos, ya que el primero está muy cerca de firmar por el Manchester City, y el segundo parece que acabará renovando con el Bayern de Múnich. Eso ha dejado a Alexander Isak como el principal candidato para ser la referencia ofensiva, una opción no demasiado convincente.
Aún es muy joven, apenas tiene 22 años, y ya acumula una experiencia muy importante en La Liga Santander. Pero lo cierto es que ha demostrado ser muy irregular, y así lo acreditan las cifras de esta campaña, en la que ha tenido que soportar muchas críticas. Nueve goles y tres asistencias es su balance con la Real Sociedad.
Al Barça no le saldría barato
El internacional sueco tiene unas condiciones muy interesantes, y aún tiene un notable margen de mejora. Pero no ha demostrado ser fiable, y tampoco ha hecho méritos suficientes para acabar jugando en el Barça. Además, no sería precisamente barato, pues desde Anoeta exigirían un pago cercano a los 50 millones de euros.
Viendo como están las cosas, Laporta no descarta acabar reculando, y quedándose con Depay.
En caso de que no encuentre nada más, no es una mala idea.