Diego Alonso ya está tomando decisiones en el Sevilla, y ha mostrado su descontento con algunas piezas de la plantilla que, en su opinión, no tienen el nivel necesario, ni han hecho méritos para seguir en el vestuario. Solamente ha necesitado de unas pocas semanas para señalar qué jugadores no están preparados para ser titulares, y ni siquiera pueden ayudar como recambios. Así que ha pedido a Víctor Orta que les dé salida en el mercado invernal.
De esta manera, podrían dejar espacio y dinero, y esto permitiría traer refuerzos en enero, pues en Nervión se ha demostrado que es necesario realizar fichajes para elevar el nivel competitivo del equipo. Y uno de los señalados por el entrenador uruguayo es Marcao, que nuevamente ha caído lesionado. Una cosa que ha acabado con la paciencia del técnico, quien no ha dudado en colocarlo en la lista de prescindibles sin dudarlo dos veces.
La realidad es que el central de 27 años nunca ha conseguido cumplir con las expectativas que generó cuando desembarcó en el Ramón Sánchez Pizjuán. Fue una apuesta personal de Monchi, ahora en el Aston Villa con Unai Emery, quien estaba convencido de que sería un nuevo acierto. Pero los constantes problemas físicos que le han acompañado, así como su irregular rendimiento, han provocado que ya no haya ningún tipo de confianza en él.
Ya es la cuarta vez que sufre de una lesión desde que aterrizó en La Liga EA Sports, y los 13 millones de euros que tuvieron que pagar al Galatarasay turco por sus servicios han sido una operación ruinosa. Será imposible recuperar lo que invirtieron, y se conformarán con obtener un poco menos de la mitad, sin descartar que se marche a préstamo. Alonso ya tiene suficientes efectivos para el eje de la retaguardia, como Sergio Ramos, Nemanja Gudelj, Loïc Badé o Tanguy Nianzou Kouassi, y por lo tanto no es necesario en absoluto.
Alonso le ha puesto la cruz a Marcao, y tendrá que buscar un nuevo desafío pronto. En el Sevilla ya no tiene futuro.
Marcao, el sucesor frustrado de Diego Carlos y de Jules Koundé
Un factor que claramente ha jugado en contra de Marcao es el hecho de que llegara con la responsabilidad de hacer olvidar las ventas de Diego Carlos y de Jules Koundé, que en su paso por la entidad andaluza se convirtieron en dos de los mejores del planeta.
No ha podido soportar la presión, y será recordado como uno de los grandes fracasos de Monchi.