Después de una Eurocopa modélica tanto en nivel futbolístico como en el de los arbitrajes, todo se ha ido al garete por el vergonzoso penalti pitado a favor de Inglaterra en la prórroga de las semifinales contra Dinamarca.
Danny Makkelie, colegiado del Inglaterra-Dinamarca, después de pitar el polémico penalti / EFE
Dinamarca se siente gravemente perjudicada
Y es que la sensación de que a la UEFA le interesaba una final Inglaterra-Italia, mucho más llamativa que un Dinamarca-Italia, se ha instalado en el imaginario colectivo. A ello hay que añadir que Inglaterra, que nunca ha ganado la Eurocopa, se ha convertido en la anfitriona, al disputar 7 de sus 6 partidos en Wembley, además de las suspicacias por la colaboración de los clubes ingleses a la hora de darle un golpe de muerte al proyecto de la Superliga.
Y aún hay más, pues en Dinamarca no se olvidan de que Kasper Hjulmand, su seleccionador, se quejó amargamente de la actitud de la UEFA tras el desfallecimiento de Eriksen, pues el organismo obligó a los daneses a terminar el partido contra Finlandia cuanto antes.
Kasper Hjulmand, seleccionador de Dinamarca / Europa Press
Quejas por un penalti inexistente
"No hay penalti. Sterling deja su pierna atrás Estamos muy decepcionados", afirmó Kasper Hjulmand tras el partido. "No hay nadie a quien culpar por el penalti porque no hubo penalti", añadió Braithwaite. "Obviamente, esto es una mierda. Estoy sin palabras. Es difícil decir algo ahora", afirmó Holbjerg.
Y es que el piscinazo de Sterling convertido en penalti por el árbitro y validado por el VAR ha puesto de uñas a Dinamarca. "El árbitro cometió un gran error con ese penalti. Hablaremos de esto durante mucho tiempo, porque no hay penalti. Es muy difícil de aceptar, porque no hay penalti", ha afirmado el histórico Peter Schmeichel.
"Me habría sentido mucho más relajado al respecto y lo habría aceptado si hubieran marcado en una de sus grandes ocasiones, pero lamentablemente el árbitro cometió un gran error desde mi punto de vista. Mi teléfono no para de sonar y todos me dicen que no hubo penalti, así que estoy bastante seguro de que tengo razón", ha añadido.
Dos balones en el césped en la jugada del penalti
Además, para rizar el rizo, en la jugada del penalti hay dos balones sobre el césped, el que conduce Sterling y uno a muy poca distancia. Antes de la jugada, el seleccionador danés se lo comunica al cuarto árbitro y los jugadores suplentes al linier, pero nadie les hizo caso.
"Le advertí al cuarto árbitro de que había dos balones en el campo", ha recordado Kasper Hjulmand, el seleccionador de Dinamarca.
Un láser y petardos para molestar a los daneses
Y no todo termina aquí, pues varios jugadores daneses se han quejado por la actitud de la afición inglesa durante el partido, que no dudó en usar pirotecnia y láseres para molestarles. "Ya estaba ahí en la primera mitad. Hubo varias cosas que no fueron justas por parte de los espectadores, pero cuando hay mucho en juego, todos los medios están claramente permitidos", ha afirmado el central Jannik Vestergaard.
Desde Dinamarca se quejan de que un láser apuntó a los ojos de Kasper Schmeichel en el momento en el que Harry Kane ejecutó el polémico penalti. "Pierre-Emile Højbjerg se lo advirtió al árbitro ya en la primera parte", añade Vestergaard.
En Dinamarca, además, ha sentado muy mal el enorme abucheo que sufrió su himno en Wembley, en un partido además, que teóricamente se tendría que estar disputando en un campo neutral.
Imagen principal: los jugadores de Dinamarca, desolados tras la eliminación contra Inglaterra / EFE