Ya ha llegado el momento que todo aficionado al motociclismo estaba esperando. Desde el pasado martes 6 de febrero, los pilotos de MotoGP están realizando los primeros tests oficiales en Sepang, en su puesta a punto para el inicio de un Mundial que dará su pistoletazo de salida el 10 de marzo en Qatar. Todos los focos, como no puede ser de otra manera, estaban puestos en Marc Márquez que, por primera vez, se ha vestido con los colores de su nuevo equipo, el Gresini Racing, donde comparte box con su hermano Alex Márquez.

Los tests de postemporada en Valencia dejaron un gran sabor de boca para el '93', sin embargo, con todos los ingenieros de las distintas marcas de la parrilla trabajando a destajo para conseguir sacar el máximo rendimiento de sus motos, los primeros días del ilerdense han sido algo 'decepcionantes'. Recordemos que el octocampeón del mundo tendrá que acostumbrarse a la Ducati, después de haber estado 11 años con una Honda con unas características muy distintas a la Desmosedici, que además, para él, será la del 2023.

Marc Márquez en los tests de Sepang con Gresini / Foto: EFE

Marc Márquez, lejos de las Ducati oficiales

Eran muchos los que decían que a pesar de tener una moto satélite, Marc sería capaz de estar en los puestos delanteros, pero se ha bajado el suflé. Si bien es cierto que el ilerdense ha conseguido bajar en casi un segundo su registro del día anterior (0.848), situándose en la órbita de los 1:57 bajos, con una sexta posición, no es suficiente. Marc ha ido de menos a más en la primera prueba de fuego de la temporada y sigue aclimatándose a su Demosedici GP23, que sufrió hasta cuatro problemas técnicos en su primer día.

El '93' sigue acumulando sensaciones para estar a punto de cara al apasionante mundial que arranca en marzo, en un circuito de Losail que trae muy buenos recuerdos a Gresini, pues han ganado en sus dos últimas visitas al trazado qatarí. El octocampeón aseguró ayer miércoles 7 de febrero que se sentía similar en cuanto a ritmo a sus compañeros, no obstante, lo que más le costaba era el time attack, tal vez al no estar acostumbrado a su nueva montura, y hoy se ha puesto manos a la obra y se han visto brotes verdes, aunque lejos del tiempo de cabeza.

Pecco Bagnaia en los tests oficiales de MotoGP en Sepang / Foto: EFE

Y es que Pecco Bagnaia y Jorge Martín, pilotos con la Desmosedici GP24, la oficial, la de este año, han volado en el último día de test, pulverizando los récords que había hasta ahora en el trazado malayo. El bicampeón del mundo, haciendo alarde de su actual condición, ha bajado del 1:57 para firmar el mejor tiempo de la jornada, con 1:56.682. Tras él, el piloto español del Pramac Racing, ha seguido la estela del que será su principal rival para alzarse con el título de MotoGP, registrando un 1:56.854.

Márquez se descarta de la lucha por el título

La Ducati de 2024 está siendo muy superior a la de 2023, que actualmente tiene Gresini. En este punto, parece que Márquez no tiene nada que hacer en la lucha por el mundial, el verdadero objetivo para un campeón como él. Todavía tiene tiempo para seguir entendiendo su nueva moto, pero él, también es consciente de que tiene que rebajar las expectativas. "Lo dije en la presentación del equipo; la expectación está claro que es muy alta, pero yo en todo momento soy realista. Estoy en una situación donde vengo de 3, 4 años los más difíciles de mi carrera deportiva donde yo tampoco he rendido al máximo nivel. Tengo que reencontrar otra vez esa confianza y los que hablan de arrasar que se olviden; habrá carreras que acabe el 10, el quinto y habrá carreras que ojalá luchar delante, tocará sufrir en la Q1 y poco a poco", aseguró al término de la segunda jornada de tests.

Jorge Martín, en el primer entrenamiento oficial de la temporada 2024 de MotoGP / Foto: Europa Press

"Si ganas un Mundial sin cometer errores, tienes que ser rápido. De momento no puedo pensar en eso porque no soy suficientemente rápido para luchar por un Mundial", dijo tajante el '93', consciente de que en Ducati no le van a poner las cosas fáciles, primero, porque las diferencias entre ambas motos son abismales, y segundo, porque no dejarán que un equipo satélite sea campeón.