El seleccionador nacional danés, Kasper Hjulmand, ha criticado a la UEFA por las presiones para retomar el partido del pasado sábado entre Dinamarca y Finlandia, en el que el jugador Christian Eriksen cayó desplomado y obligó a la suspensión de este en el minuto 42 hasta horas más tarde.
"Por Covid-19 se puede retrasar un partido; por un paro cardiaco, no"
Hjulmand ha comparecido esta tarde en rueda de prensa y ha explicado cómo se desarrollaron las conversaciones entre el organizador del torneo y las dos selecciones afectadas. UEFA anunció que los futbolistas habían pedido disputar lo que faltaba de partido, cosa que Hujlmand ha negado hoy. El entrenador asegura que la decisión de seguir jugando fue "solo de la UEFA", que el sábado emitió un comunicado en el que decía que "después de la petición de los jugadores de los dos equipos, la UEFA ha acordado reiniciar el partido entre Dinamarca y Finlandia a las 20.30h".
Los jugadores de Dinamarca tapando a su compañero delante de las cámaras / Europa Press
"Por Covid-19 se puede retrasar un partido 48 horas, pero por un paro cardiaco, no. Creo que está mal. A veces, un buen liderazgo se lleva a cabo a través de la compasión. El único liderazgo real habría sido meter a los jugadores en un autobús y enviarlos a casa y, después, bregar con la situación", ha añadido Hjulmand indignado por las presiones de UEFA. "Sentimos que presionaron y nos colocaron en un dilema", ha finalizado.
"Estuvo muerto en algún momento"
Eriksen, a quién todavía le están realizando pruebas médicas para conocer qué le pasó exactamente, ha publicado hoy en sus redes sociales una fotografía indicando que "se encuentra bien".
El jugador entró en parada cardiorrespiratoria y fue atendido en el césped por los sanitarios del estadio, los cuales intentaron reanimarle durante casi 15 minutos. Sus compañeros de equipo lo rodearon para evitar que las cámaras grabaran al futbolista antes de ser evacuado al hospital, ya consciente.
Aunque fue trasladado al Rigshopitalet de Copenhague en estado "estable", el médico de la selección danesa, Martin Boesen, reconoció que el jugador del Inter "estuvo muerto en algún momento" antes de ser reanimado por él mismo. "Lo recuperamos con la primera descarga del desfibrilador", ha indicado.
Imagen principal: Kasper Hjulmand durnant un entrenamiento de la selección danesa / EuropaPress