Emili Rousaud, lejos de querer callar después que el Barça anunciara interponerle una demanda, el exdirectivo se reafirma en sus palabras que en el club "alguien ha puesto la mano en la caja". En un comunicado, ha expuesto las razones de sus incendiarias declaraciones y ha dejado la puerta abierta a emprender acciones legales contra el club.

Después de dimitir la semana pasada junto con cinco directivos más, el exvicepresidente institucional del Barça es noticia prácticamente cada día. Esta vez ha asegurado que "la existencia de corrupción en el seno del club queda patente en el hecho ya demostrado que hayan desmenuzado contratos entre compañías vinculadas a fin de evitar los controles internos, las aprobaciones por parte del Comité de Adjudicaciones y de la Junta Directiva". Unas palabras que no se quedan aquí y añade que todo lo que ha manifestado hasta ahora son afirmaciones "absolutamente ciertas y demostrables".

Aparte, Rousaud asegura que la querella del Barça contra él "no tiene ningún tipo de fundamento". Y también recalca que "en su momento puse en conocimiento del club estas irregularidades pero, desgraciadamente, han sido la causa de mi dimisión".

EuropaPress

Acciones legales contra el Barça

Por este motivo defiende su postura de "llevar a cabo las acciones que en derecho procedan en defensa de mis legítimos intereses y derechos". Y cree que la querella anunciada por el club "podría ser constitutiva de un delito de denuncia falsa y de un delito de injurias dado que su finalidad real podría ser únicamente manchar mi honorabilidad personal".

Rousaud también ha impulsado la web FemNetFCB.cat para intentar recoger apoyos de socios y aficionados los cuales quieran "que se haga pública toda la verdad" del BarçaGate.