Uno de los jugadores más importantes del FC Barcelona desde la llegada de Xavi Hernández al banquillo ha sido Ronald Araujo. El uruguayo ya se había consolidado en el primer equipo de la mano de su tocayo Ronald Koeman, pero ha sido con Xavi cuando ha dado un paso más y en muchos partidos ha sido el jugador más destacado en defensa, poniendo en valor su gran rendimiento y su importancia en este equipo.

Xavi lo quitó en el descanso por tercera vez

Pero el charrúa, que acaba contrato en 2023, sigue en conversaciones con el club para prorrogar su contrato y aumentar considerablemente su sueldo. Él sabe que el Barça lo necesita, y quiere aprovecharlo para verse premiado con un buen contrato, a la altura de los jóvenes cracks como Pedri o Ansu Fati o cercano al sueldo que tendría Andreas Christensen si acaba llegando al equipo.

Araujo lucha un balón aéreo contra el Galatasaray / EFE

Sus representantes están mostrándose exigentes, y aunque el futbolista siempre ha dicho que su única prioridad es seguir triunfando de blaugrana, los nervios alrededor de su futuro siguen existiendo en el club, y eso es incómodo para todos, también para Xavi Hernández. Y así se demostró en el partido de este jueves contra el Galatasaray, en la ida de los octavos de final de la Europa League.

En este encuentro, sucedió algo inédito con el entrenador de Terrassa y el central de Rivera como protagonistas. Es la tercera vez que Xavi lo cambia de un partido en el descanso, pero en la primera ocasión fue en Linares, en un partido de Copa que el Barça debía decidir sin mucho problema, aunque acabaran sufriendo.

Quiere renovar con un gran contrato

La segunda vez tuvo que irse lesionado, y fue en el derbi contra el Espanyol. Eric Garcia entró en su lugar y el central catalán acabó muy superado por los pericos, demostrando que el charrúa está muy por encima. Pero eso no se demostró esta semana.

Gerard Piqué y Ronald Araujo / Europa Press

Porque tras una primera parte muy plana de los blaugrana contra los turcos, Xavi quiso revolucionar el equipo e introdujo tres cambios de golpe. Busquets entró por Nico, Dembélé sustituyó a Ferran Torres y Piqué, efectivamente, entró por Araujo. En esta ocasión, el uruguayo no estaba lesionado y y era un partido de máxima exigencia.

Queda por ver si eso será el inicio de una tendencia, pero el deseo de todos es que Araujo renueve cuanto antes y se olvide de los cantos de sirena que llegan desde Europa, que quieren tentarlo con contratos millonarios. Está destinado a triunfar en el Barça, y va camino de ello, pero todo puede torcerse de un día para otro.

 

Imagen principal: Ronald Araujo lamenta una acción durante un partido del Barça / Europa Press