Raphinha está pasando por un buen momento, y ha sido capaz de consolidarse como titular en el Barça, aprovechando la lesión de Ousmane Dembélé. Pero la realidad es que sigue estando por debajo de las expectativas, y se esperaba que pudiera convertirse en una de las estrellas del equipo. Todavía tiene mucho por mejorar, y es evidente que cuando regrese ‘El Mosquito’, tendrá que aceptar nuevamente un papel secundario.
Xavi Hernández no parece confiar en exceso en las habilidades del astro brasileño, que es demasiado irregular. No toma buenas decisiones en los metros finales, y en muchas ocasiones peca de ser excesivamente individualista y egoísta. Por esa razón, Joan Laporta estudia muy seriamente la idea de traspasarlo cuando finalice la temporada, en caso de que no sea capaz de mejorar las prestaciones que está ofreciendo en sus primeros meses en La Liga Santander.
En el mes de enero ya tuvieron la posibilidad de darle salida, y hubo clubes que preguntaron por su situación. El Chelsea y el Arsenal fueron los más interesados, pero el problema es que ninguno pasaba de los 30 millones de euros, prácticamente la mitad de lo que tuvieron que desembolsar desde el Camp Nou para sacarlo del Leeds United. No se conformaban con eso, y pedían mucho más dinero, provocando que las negociaciones se rompieran.
Aunque en el mercado estival pueden verse obligados a aceptar la venta de Raphinha por un precio razonable. Si no llegan propuestas más interesantes, no tendrán más remedio que aceptar las que reciban, si bien eso supondría perder muchos ingresos. Pero tienen la esperanza de que algún conjunto pague lo que reclaman, y hay uno que ha aparecido en el horizonte. Hablamos del Newcastle United, considerado el combinado más rico de Inglaterra y de todo el planeta, después de la llegada de Mohammed Bin Salmán a la propiedad.
Si logran clasificarse a la próxima edición de la Champions League, tienen en mente hacer varios movimientos ‘top’, y en su agenda de objetivos figura el extremo del Barça.
Laporta espera un milagro
Laporta parecía haber perdido la esperanza, pero ahora tiene fe en que suceda un milagro, y los ‘magkpies’ se decidan a presentar una ofensiva por Raphinha lo suficientemente convincente. De manera que podrían recuperar lo que pagaron, e incluso sacar una plusvalía.
Todo dependerá de Bin Salmán, que puede convertirse en un aliado del Barça, y llevarse a uno de los problemas de la plantilla.