La final de Copa del Rey 2024 que tendrá lugar en La Cartuja se preveía como una fiesta del fútbol para los aficionados del Mallorca y del Athletic Club de Bilbao. Sin embargo, varios grupos radicales de ambos equipos han protagonizado este viernes a la tarde un enfrentamiento en la Alameda de Hércules de Sevilla y han ensuciado un ambiente que, hasta el momento, estaba siendo festivo y de buena convivencia entre ambas aficiones.
Los incidentes han tenido lugar alrededor de las 15:00 horas en la zona norte de la Alameda, una conocida zona de bares y terrazas de Sevilla. Allí se encontraban los aficionados del Mallorca, que han vivido momentos de tensión tras verse sorprendidos por varios grupos de ultras. A escasos metros del lugar se ubica una comisaria de Policía Nacional y gracias al despliegue previsto para la final se ha podido disolver el incidente con rapidez.
Varios encapuchados lanzan vasos, sillas, mesas y bengalas
Pese a que la fanzone del Mallorca se sitúa en el Parque del Alamillo, algunos aficionados se encontraban en la Alameda de Hércules, una conocida zona de bares y terrazas. Allí se han visto sorprendido por un grupo de ultras del Athletic Club que, encapuchados y tapados con distintivos de su equipo, han comenzado a lanzar vasos, botellas, sillas, mesas e incluso bengalas hacia otro grupo de ultras del Mallorca. En medio de todo el caos se han llegado a ver golpes entre los implicados.
En mitad de la Alameda se han podido ver varios heridos, mientras que las fuerzas policiales han intervenido rápidamente para dispersar los incidentes. Gracias al gran despliegue policial previsto para la Final de Copa del Rey 2024, los incidentes no ha trascendido a mayores. De momento hay cinco identificados, pero no se ha confirmado que haya alguna detención. Este se trata de un caso aislado en medio de una jornada festiva y de buena convivencia entre aficiones.
Ambiente festivo entre ambas aficiones durante toda la jornada
Este incidente entre radicales de ambos clubes ha ensuciado un ambiente que durante toda la jornada había sido festivo y de buena convivencia entre aficiones. De hecho, las calles de Sevilla se habían convertido en una fiesta que Mallorca y Athletic Club han podido compartir sin problema. Más de 70.000 athleticzales han viajado hacia la capital hispalense, pero solo 25.000 cuentan con entradas. A estos hay que sumarles los más de 50.800 leones que rugirán desde San Mamés para animar a su equipo al otro lado de las pantallas que el club ha instalado para que los aficionados que lo deseen puedan disfrutarlo desde Bilbao.
Pese a las dificultades que muchos se han ido encontrando para llegar a la ciudad andaluza, son más de 20.000 aficionados que representarán al Mallorca en el estadio de La Cartuja y buscarán repetir la hazaña de 2003, cuando tocaron plata tras vencer al Recreativo de Huelva en la final. Sevilla espera que la final transcurra sin incidentes y que no se repita ningún tipo de incidente antes, durante o después del partido.