La euforia por haber conquistado la Supercopa de España y haber goleado de nuevo al eterno rival, el Real Madrid, no despista ni a Joan Laporta ni a Deco. El Barça sigue teniendo mucho trabajo por delante en este mes de enero, y la prioridad es que se solucione de manera definitiva el problema que plantean las inscripciones de Dani Olmo y de Pau Víctor. Pero tampoco se olvidan de las salidas de aquellas piezas que no tienen espacio en los planes.
Porque Hans-Dieter Flick ha señalado a varios jugadores que no están cumpliendo con las expectativas, y que no han hecho méritos para tener más minutos. Y uno de los principales candidatos a hacer las maletas es Eric García, quien no ha logrado aprovechar las oportunidades que ha tenido, y ha seguido defraudando en su etapa por el Camp Nou, a pesar de que venía de completar un año fantástico durante su préstamo por las filas del Girona.
Se convirtió en una de las grandes revelaciones de La Liga EA Sports, y esto provocó que le dieran una reválida, viéndose claramente beneficiado por la destitución de Xavi Hernández, que ya le había puesto la cruz. Las lesiones que existían en la defensa y en el centro del campo provocaron que ‘Hansi’ decidiera contar con el ex del Manchester City, pero rápidamente quedó comprobado que no se adaptaba a los sistemas, ni al estilo de juego.
Así que la paciencia ya se ha agotado con el internacional español, que ya tiene las puertas abiertas. Con Ronald Araújo totalmente recuperado, y Andreas Christensen muy cerca de reaparecer, además de la irrupción de algunos talentos de La Masía como Andrés Cuenca o Landry Farré, es un futbolista totalmente prescindible para el Barça. Y la intención de Laporta y de Deco es poder obtener unos ingresos importantes con la venta de un crack que llegó a coste cero.
Eric tendrá que salir con efecto inmediato, ya que es la mejor solución para todas las partes involucradas.
El Girona negocia para el regreso de Eric
Y todo hace indicar que Eric acabará regresando al Girona, donde Michel Sánchez le espera con los brazos abiertos, pues estaría encantado de volver a tenerlo a su disposición.
A priori, el acuerdo con el Barça está cerca de concretarse, y debería de dejar unos 10 millones de euros en las arcas. Deco ya ha hablado con García, para comunicarle que tendrá que irse.