El Espanyol ha vuelto a coger la buena dinámica que tiene que servir para conseguir el objetivo de subir a Primera División. Los blanquiazules han goleado al Fuenlabrada (4-0) en el RCDE Stadium este jueves después de un doblete de Raúl de Tomás y de una expulsión en los primeros minutos, y siguen líderes en la Segunda División.

El club perico ha tenido el gran beneficio que Nteka ha sido expulsado en el minuto 17 después de que el VAR certificara que el futbolista había tocado la pelota con la mano en el remate de RDT. Tarjeta roja y penalti favorable que no ha fallado el delantero.

El conjunto madrileño no ha tenido su mejor día y Pinchi se ha tenido que retirar por lesión. Ante este panorama favorable, los blanquiazules han querido poner la vía directa y Embarba ha marcado el segundo gol antes de la media hora de juego y Pulido, en propia puerta, ha puesto el 3-0 antes del descanso.

El Espanyol ha sido superior en todas las fases del juego durante el primer tiempo y lo tenían todo controlado para llevarse los tres puntos. Con un cómodo 3-0, los de Vicente Moreno han bajado una marcha más, RDT ha hecho el cuarto y último gol, firmando un doblete, y ha sentenciado al Fuenla.

Los pericos han tenido más ocasiones para ampliar el marcador, pero Wu Lei no ha estado acertado de cara portería. Diego López ha tenido una tranquila tarde en el RCDE Stadium.

El Girona remonta

Por otra parte, el Girona y el Sabadell se vieron las caras este miércoles en una jornada entre semana de Segunda División que ha aprovechado el parón de selecciones para seguir sumando partidos.

Gerundenses y sabadellenses firmaron un empate (2-2) después de que Molina abriera el marcador con un gol en el minuto 8. Gumbau volvió a poner las tablas en el luminoso, pero Molina quiso hacer daño y marcó antes del descanso. El del Sabadell hizo de aquellos goles que se dicen psicológicos y que perjudican al rival. El Girona se pudo reponer y Samu Saiz hizo el 2-2 para acabar así el partido y repartirse un punto para cada uno.

 

Imagen principal: Los jugadores del Espanyol celebran un gol / RCD Espanyol