El Espanyol empató el cuarto amistoso de la pretemporada contra el Twente holandés en un duelo condicionado por la suspensión, durante diez minutos, del encuentro por parte del árbitro después de que los futbolistas blanquiazules protestaran de forma reiterada la expulsión por roja directa de Pablo Piatti. 

En la primera parte a los jugadores de Quique Sánchez Flores les costó trenzar jugadas largas, y no disfrutaron de ocasiones claras de gol. Por su parte, el conjunto holandés puso a prueba con diferentes disparos lejanos a un Pau López muy seguro. Nikola Gjorgjev dispuso de dos disparos a la media hora de partido, mientras que la dupla atacante Sergio García y Leo Baptistao seguía muy espesa en ataque.

En la reanudación, en cambio, el Espanyol salió dispuesto a cambiar el signo del choque. Lo hizo guiado por Baptistao que, ahora sí, creaba peligro al contraataque. Además, el brasileño tuvo hasta tres ocasiones que daban otro aire al encuentro y que sirvió para mejorar la dinámica del equipo. 

Juego parado durante diez minutos 

Todas las mejoras del Espanyol se vieron frenadas en el minuto 60. No fue por la expulsión de Piatti por roja directa, sino por la reacción del colegiado. Los jugadores blanquiazules protestaron al holandés Bas Nijhuis y, de forma sorprendente, decidió anular el partido.

Durante diez minutos, la incertidumbre reinaba en el Sportpark Heeckeren, hasta que el árbitro internacional decidió reanudarlo. El Espanyol celebró la decisión con una foto en las redes sociales de Nijhuis y el texto "Se queda", en alusión directa a la fotografía que Piqué colgó para intentar que Neymar no abandonara el Barça.

Después de este parón, el encuentro no volvió a tener el ritmo que había tenido durante los primeros instantes de la segunda parte. Pese a los intentos de ambos conjuntos de superar el empate, el desenlace apenas sirvió para ver buenas actuaciones del portero del juvenil Adrià López. 

"El árbitro nos faltó al respeto"

La actuación de Bas Nijhuis enfadó a Quique Sánchez Flores, que una vez finalizó el encuentro, afirmó que les había faltado al respeto: "Vinimos a jugar un amistoso y nos encontramos una actitud un poco chulesca, muy sobrado con los jugadores, faltó al respeto al equipo. Ha tenido una actitud rarísima y, hasta que no nos hemos quedado con diez, no ha estado tranquilo".