La era de Pep Lluís Martí en el Girona empieza con buen pie. Este domingo, el conjunto rojiblanco ha derrotado al Extremadura a domicilio (1-3) gracias a los goles de Àlex Granell, Cristhian Stuani y Jonathan Soriano. El equipo de Montilivi tendrá que mejorar sus prestaciones si quiere aspirar al ascenso directo, pero en Francisco de la Hera ha puesto de manifiesto que empieza la era del pragmatismo. Martí no engaña: juego directo, líneas juntas y, si hace falta, doble lateral. Con el triunfo, su equipo suma 20 puntos y deja ser el peor visitante de la categoría.

Yamaguchi, un amigo

En la primera parte, el Girona ha firmado un primer tiempo decente en el cual ha contado con la ayuda inestimable del portero local, Louis Yamaguchi. Pep Lluís Martí ha apostado por un esquema similar al de Juan Carlos Unzué, con Granell y Gerard Gumbau en el doble pivote y Jairo y Àlex Gallar en las alas, pero a diferencia del técnico navarro, el nuevo entrenador del conjunto gerundense ha priorizado la solidez defensiva y el juego directo. Con las líneas juntas y el pragmatismo por bandera, sus hombres han buscado la cabeza de Stuani con regularidad y sin complejos. El fútbol de toque y posesión parece que ha pasado a mejor vida, especialmente en campos como los del Extremadura.

Aunque no estaba ofreciendo un juego brillante, el Girona ha encontrado el premio del gol muy pronto. Ha sido en el minuto 17, cuando Granell ha picado una falta directa desde mucha distancia que Yamaguchi, de manera incomprensible, no ha sabido parar. Antes, el capitán gerundense ya había podido marcar con otro lanzamiento de falta, pero la pelota había acabado rozando el palo.

El show de Yamaguchi, sin embargo, no había acabado. Diecisiete minutos después de tragarse el tiro de Granell, el portero francojaponés ha vuelto a entrar en acción, esta vez para regalarle el gol a Stuani. Borja García lo ha intentado superar con un disparo desde la parte izquierda del área y él, en lugar de bloquear o rehusar la pelota a un lado tal como mandan los cánones de este deporte, ha situado el esférico en la cabeza del delantero uruguayo. Novena diana de la estrella del Girona, que ya es el pichichi de Segunda, y 50.ª con la camiseta rojiblanca.

Jonathan Soriano se estrena

El Girona tiene un nuevo entrenador pero, por lo qué parece, conserva vicios adquiridos. En la segunda parte, el conjunto rojiblanco ha saltado al terreno de juego completamente dormido y lo ha pagado caro. Primero, Stuani se ha lesionado en el aductor y en su lugar ha tenido que entrar Jonathan Soriano. Después, Airam Cabrera ha marcado en fuera de juego y la diana ha sido anulada. Finalmente, en el minuto 58, Kike Márquez ha situado el 1-2 en el marcador con un remate de cabeza cruzado.

Pep Lluís Martí, sin embargo, es un técnico pragmático. Inmediatamente después de recibir el gol, el mallorquín ha sustituto a un extremo como Gallar por un defensa como Pablo Maffeo y los resultados no han tardado al llegar. Con el Extremadura presionando para buscar el empate, su equipo ha conseguido trenzar un contraataque letal en el minuto 72, cuándo Jonathan Soriano ha firmado el 3-1 a pase de Jairo. Ha sido la primera diana del delantero catalán con la camiseta del Girona.

Su gol ha hundido al Extremadura, el peor local de la categoría, y ha dado aire a un Girona que, en lejos de buscar el cuarto, se ha limitado a defender. Las señales que transmite Martí son inequívocas, para subir hay que arremangarse.

Con la victoria, el Girona escala hasta la novena posición de la clasificación con 20 puntos, a 4 del ascenso directo. El próximo viernes, a las 21:00, Martí se estrena en Montilivi delante del Tenerife, uno de los equipos con los cuales casi consigue el ascenso.