El Barça, el líder de la Liga Santander, no brilla pero sí gana y celebra contra el Getafe en el primer día del año en el Camp Nou (1-0). No se ha visto un gran partido, pero sí suficiente gracias al solitario gol de Pedri González en la primera mitad.
El Barça de las celebraciones
Volvía el fútbol al Camp Nou y debutaba en este 2023. Y antes del duelo se ha celebrado el año chino, el del conejo, también la victoria en la Supercopa de España y los 700 partidos de Sergio Busquets, nuevamente titular y el timón de un Barça alegre y con ganas de más títulos. Ansu Fati ha hecho de Lewandowski, que era la gran duda. Pero lo que no ha cambiado es el espíritu ganador.
El Barça ha corrido como un conejo, ha sido veloz, activo y con mucha energía. Los blaugrana han impuesto ritmo desde el inicio y haciendo una presión muy alta. No han tardado mucho en llegar las primeras ocasiones culés. Antes, sin embargo, un gol anulado en el minuto 4 a Borja Mayoral, del Getafe, por un fuera de juego muy claro. El arbitraje, con debutantes en el Camp Nou, ha generado el nerviosismo constante de los 79.814 culés en el feudo culé.
Ousmane Dembélé y Raphinha, como puñales desde los extremos, igual que Pedri y Pablo Gavi, entrando siempre desde la segunda línea. Les ha costado más brillar a los cuatro defensas, desde las bandas con Balde y Sergi Roberto, a Christensen y Kounde en el eje. El Barça jugaba a atacar y a buscar el gol. Pero ha costado mucho más de lo esperado, ya que las pilas también se han agotado. Pero antes del descanso, en el minuto 35, Pedri ha marcado el gol culé después de una asistencia de Raphinha posterior a un grave error del Getafe. Y Ter Stegen también ha tenido tiempo de demostrar su altísimo estado de forma y resolver los pequeños desajustes en defensa.
Vuelve el nerviosismo en el Camp Nou
Pero Xavi Hernández ha querido cambiar la cara del equipo en defensa al descanso. Christensen y Balde se han quedado en el banquillo y han entrado Jordi Alba y Eric Garcia. Defensivamente no se ha sufrido y realmente se ha sido más sólido, pero es que ofensivamente se ha bajado el ritmo. Al Barça le ha costado encontrar espacios ante una defensa del Getafe muy cerrada. Y entonces ha tenido que entrar Kessie por Raphinha y así volver a apostar por la fórmula de Gavi como falso extremo.
El Barça, sin embargo, no ha podido mejorar, y entonces el Getafe ha dado un paso adelante para intentar empatar. Y los blaugrana han sufrido. Como siempre. Año nuevo y viejas costumbres. Marcos Alonso ha tenido que entrar por Sergi Roberto para redefinir una defensa culé que estaba teniendo problemas.
Y después de unos minutos finales con cierto nerviosismo culé, muchas pérdidas del Barça y con una ocasión muy clara de Kessie, ha llegado el pitido final. Muy esperado. El Barça sigue celebrando y el Getafe sigue sin ganar en el Camp Nou.