El Barça ya tenía asegurada la segunda posición de la Liga, pero aún y así había la conjura de cerrar la temporada dejando un buen sabor en la boca de los aficionados, una victoria contra el Villarreal, un equipo de nivel, para demostrar que el cambio de tendencia que se espera para la campaña que viene se iniciaba antes de irse de vacaciones. La realidad, sin embargo, ha sido bien diferente, con otro ejemplo del quiero y no puedo que tanto ha acompañado al Barça esta temporada. Porque los blaugrana no han jugado mal, pero han vuelto a perder por su falta de contundencia en las áreas, un mal que le ha perseguido todo el curso y que ha provocado que la afición haya acabado pitando al equipo.

Para despedir la temporada, Xavi Hernández ha optado por una alineación de gala, con la única sorpresa de Adama Traoré como titular en el tridente ofensivo, junto a Ferran Torres y Aubameyang. El resto del once del entrenador de Terrassa ha sido el esperado, con Araujo y Lenglet en el eje defensivo, Dani Alves y Jordi Alba en los laterales y Busquets, De Jong y Gavi en el centro del campo.

Pedraza, tras marcar el 0-1 en el Barça-Villarreal / EFE

El Barça ataca; el Villarreal marca

Y sin presión, el Barça ha empezado muy bien el encuentro, concentrado en la presión tras pérdida y con movilidad en las jugadas de ataque, con un Adama mucho más activo que un Ferran Torres que ha llegado al final de la temporada poco inspirado. El valenciano, sin embargo, ha tenido la primera ocasión blaugrana, una semivolea que Rulli ha desviado con acierto (7'). Poco después, Frenkie de Jong no ha llegado por poco a un buen centro de Ferran Torres (11'). Y más clara ha sido la siguiente, un obús de Sergio Busquets que se ha ido fuera por muy poco (20').

Con un Adama Traoré muy activo, el Barça ha seguido atacando con insistencia, en busca del gol que encarrilara la victoria. En el minuto 36, Aubameyang lo ha intentado con un disparo desviado. Y cuando mejor estaba el Barça, ha llegado el gol del Villarreal. Jugada de transición liderada por Parejo, Pedraza se planta solo ante Ter Stegen y abre el marcador, un 0-1 injusto, pero que ejemplifica los problemas que ha tenido el equipo blaugrana esta temporada, el poco acierto en el remate y la preocupante fragilidad defensiva.

Araujo, cortando un balón en el Barca-Villarreal de este domingo / EFE

0-2 y falta de reacción

Tras el descanso, el Barça ha seguido igual que en la primera parte, dominando el juego y generando peligro con relativa facilidad. En el minuto 53, Lenglet no ha rematado por poco un excelente centro de Dani Alves, en una falta lateral, y acto seguido el Villarreal ha marcado el 0-2, tras un error grosero de Adama Traoré, que ha despejado un balón al punto de penalti, para que Moi Gómez fusilará a Ter Stegen a placer.

Quedaba más de media hora por delante, pero el Barça ha sido incapaz de acercarse a la remontada, y eso que Xavi Hernández ha intentado revolucionar el ataque dando entrada a Dembélé y Ansu Fati. El Barça cierra la temporada con una derrota indolora, pero que ha sido el resumen perfecto de un año muy irregular. Sin jugar del todo mal ha caído ante un rival mucho más efectivo en ambas áreas. Ha llegado la hora de reflexionar y de tomar decisiones.

 

Imagen principal: Frenkie de Jong, intentando rematar un centro de Ferran Torres / EFE