El central brasileño Felipe llegó al Atlético de Madrid en 2019 tras hacerse un nombre con actuaciones muy destacadas en el Porto. Entró en el conjunto colchonero con muy buen pie. Su primera temporada fue de un nivel altísimo, y en la campaña anterior también rindió bien, aunque se empezó a intuir que su nivel bajaría, como está pasando en este inicio de temporada. Su presencia en las alineaciones ha bajado mucho. Entre Savic, José María Giménez y Mario Hermoso se alternan las posiciones del eje de la zaga, y aunque Felipe ha participado en ocho partidos de liga y cuatro de Liga de Campeones, no está rindiendo al nivel deseado.
Felipe puede volver a casa
Además, a sus 32 años, el veterano defensa se plantea una vuelta a su país natal, y más todavía teniendo una oferta del Flamengo encima de la mesa. Uno de los clubes más grandes de Brasil y del continente americano, recién subcampeón de la Copa Libertadores, quiere reforzar su zaga y ha pensado en él. Felipe tiene nivel para seguir compitiendo en Europa con la máxima exigencia que eso supone, pero habrá que ver si prioriza otras cosas. En el Atlético no se opondrían frontalmente a su salida, y por eso ya andan buscando posibles relevos para el brasileño, y Simeone ha pedido a un defensa ex del Barça, el colombiano Yerry Mina.
El cafetero apenas jugó seis partidos con el Barça, pero desde que llegó a la Premier League de la mano del Everton se ha convertido en uno de los referentes toffees. Ya acumula 83 partidos jugados, aunque esta temporada arrastra problemas físicos que le están impidiendo jugar. De hecho, su última aparición fue el 2 de octubre, en el empate ante el Manchester United. Mina se lesionó en el muslo y su equipo lo está notando. Desde su ausencia, no han ganado ni un solo partido y han sumado apenas un punto de los 21 que ha habido en juego.
Yerry Mina vale 25 millones
En el Atlético, y sobre todo el Cholo Simeone, saben que cuándo se recupere físicamente y vuelva a tener ritmo de competición, puede dar un gran rendimiento y no quieren esperar a verano para intentar su fichaje, y están dispuestos a presentar una oferta este mismo mes de enero. En el Everton lo valoran con la importancia que tiene en su equipo, y no aceptarán una oferta que no se acerque a los 25 millones de euros. El Atlético sabe que tocará invertir para reforzar su defensa, puesto que con los 32 años de Felipe es difícil que obtengan un traspaso demasiado alto.
Además, la situación del Everton no es la mejor. Con Rafa Benítez en la cuerda floja, y en la decimoquinta posición en Premier, lo último que pretenden los dirigentes del club de Liverpool es perder a uno de sus jugadores más regulares, por lo que el Atlético deberá convencer al club británico con dinero.
Para Yerry Mina, la oportunidad es perfecta. Daría un salto a un equipo Champions, y trabajaría bajo las órdenes de un maestro defensivo como Simeone. A sus 27 años, Mina ha alcanzado la madurez futbolística, pero está por ver si tendrá la oportunidad de demostrarlo de nuevo en la liga española.