Fermín López, o a partir de ahora Ferminator para algunos, es un diamante en bruto que el Barça está puliendo y que ya brilla con luz propia. Un soldado que siempre está predispuesto a todo y que ha sido uno de los nombres propios de la victoria blaugrana contra el Bayern de Múnich en la Champions League. Montjuïc se ha rendido al futbolista andaluz y los culés han visto la confirmación de una estrella en potencia.
Fermín, un jugador entregado al equipo
Cuando el Barça necesita soluciones, entonces aparece Fermín. Que esté justo recién recuperado de una lesión, que esté en plena forma o que no esté con ritmo de competición... da igual porque siempre está dispuesto a lo que sea. Es un soldado para quien lo necesite, un nuevo guerrero que ha aparecido del vestuario de Hansi Flick, como una sombra que siempre sabe donde tiene que estar. Y cuando tiene que ser técnico y hábil, también es uno de los elegidos.
Fermín no hace ruido, pero todo el mundo lo quiere tener en su equipo. Y tanto Xavi Hernández la temporada pasada cuando lo recuperó del infrafútbol español, como esta temporada Hansi Flick, se están aprovechando de uno de los jugadores más infravalorados del Barça.
Un espectáculo de Fermín en la Champions League
Y pocos días después de estar un mes alejado de los terrenos de juego por problemas musculares, ha sido el último hombre para hacer carburar al Barça. Libre en la zona de la mediapunta y con comodidad para correr arriba y abajo, ha sido el tercer hombre del medio del campo culé elegido para ser titular contra el Bayern de Múnich.
Su efervescencia se ha notado antes del primer minuto, haciendo un volteo perfecto en el círculo central y completando una asistencia magistral para que Raphinha abriera el marcador en Montjuïc. Sus fintas, en todo momento pensando a mil revoluciones y con mucha rapidez de ejecución, pero también demostrando que es muy astuto. Pasada la media hora de juego, pequeño empujón a un rival y asistencia de vaselina sobre Manuel Neuer y Dayot Upamecano para que Robert Lewandowski marcara el segundo gol de una maravillosa noche culé. Dos pases de gol en una noche de crecimiento brutal del Barça en Europa.
Y se ha confirmado que en los últimos años el Barça agradece este tipo de jugadores como Fermín, entregados y que nunca se quejan. Siempre suma y es una pieza fundamental dentro del vestuario porque sabe cuándo dejar sitio a otros compañeros y acepta dar el paso al lado cuando toca, una cosa que en el fútbol profesional muchas veces cuesta tanto aceptar. 61 minutos excelsos contra el Bayern de Múnich. Pon un Fermín en tu vida.