Aston Martin hace semanas que amaga con volver a ser competitivo, pero este último fin de semana, en el GP de los Estados Unidos, fue la gota que colmó el vaso. Al ser fin de semana a sprint, ni la escudería británica ni nadie tuvo más de una hora de entrenamientos libres. Mercedes y Ferrari lo pagaron caro con las sanciones a Lewis Hamilton y Charles Leclerc por el exceso de degradación del plank de su monoplaza, pero Aston Martin, que fue a mejor desde el desastre de qualy del viernes, no encontró hasta el domingo la configuración adecuada de su AMR23.

Tanto Fernando Alonso como Lance Stroll rodaban en zona de puntos cuando la escudería británica detectó daños en el monoplaza del asturiano, viéndose obligada a retirarlo. En este sentido, sumando las dos plazas que hubieran ganado después de las descalificaciones de Hamilton y Leclerc, hubieran salido con un buen botín de puntos a pesar de partir desde el pit lane. No obstante, esta vez no por falta de competitividad en carrera, sino por mala suerte, Aston Martin sigue hundiéndose.

Fernando Alonso, piloto de Aston Martin / Foto: EFE

Primero Mercedes, después Ferrari y ahora McLaren

Primeramente, fue Mercedes quien amenazaba con adelantar en el Mundial de Constructores. Lo hizo justo cuando Aston Martin caía en picado y, en ese entonces, Ferrari pasó como un relámpago y McLaren, de estar a 149 puntos por debajo, acabó de recortar esta distancia hasta ponerse 6 por encima después del domingo de Austin.

Lando Norris y Oscar Piastri empezaron la temporada muy flojos, pero desde Silverstone se han cambiado los papeles con Aston Martin y ahora son los coches verdes los que están mucho por detrás de los naranja. En este sentido, no se puede esconder el fracaso en el Mundial de Pilotos. Evidentemente, ninguna culpa tiene Fernando Alonso, que hasta este pasado domingo, no había abandonado en toda la temporada.

No obstante, si cazar el subcampeonato de Checo Pérez ya parecía una quimera, el tercer lugar, propiedad de Hamilton a 18 puntos, ya parece haberse escapado. Sea como sea, aquí no acaba todo, ya que Carlos Sainz se acerca peligrosamente y ya está a 12 puntos de Fernando. Lando Norris, por detrás suyo, está a 24 del asturiano, pero en vista del ritmo de los McLaren y del estado de forma del inglés, su llegada parece inminente. Y ya, para colmo, Leclerc viene a 32 puntos, una distancia considerable, pero muy peligrosa en vista de que Aston Martin sigue sin estar.

Fernando Alonso, a bordo del AMR23 bajo la noche del Qatar / Foto: Europa Press

Fernando Alonso, de optar al subcampeonato a temer caer al 7.º lugar

A día de hoy, si Aston Martin no vuelve ya a puntuar bien, Fernando Alonso es un caramelo para los Sainz, Norris y Leclerc que tiene como perseguidores. Por esta razón, la sensación de optar al subcampeonato a pasar a temer caer al 7.º lugar en cuestión de pocas semanas se puede catalogar como auténtico fracaso después de una primera mitad de temporada absolutamente brillante.