Fernando Alonso empieza a despertarse del sueño de volver a ser campeón de Fórmula 1. Aston Martin no ha podido seguir el ritmo del desarrollo de un monoplaza que, a inicio de temporada, parecía estar destinado a competir de tú a tú con el, casi, imparable Red Bull de Max Verstappen. Pero, nada es lo que parece, ni es oro todo lo que reluce, y es que con el tiempo, se le han ido viendo las costuras al AMR23.
Lejos quedan Grandes Premios como Móncaco, Canadá o Zandvoort, donde el piloto asturiano se acercó a una victoria número 33, que cada vez más resulta una quimera. Y es que lo visto en trazados como los de Singapur o Suzuka, se acerca más a la realidad de un Aston Martin que se ha ido diluyendo como un terrón de azúcar en un café, un descenso a los infiernos que ha coincidido con una evolución espectacular de escuderías como Ferrari y McLaren.
Aston Martin no mejora y McLaren, con tendencia al alza
La historia empezó a cambiar para los de Woking en el Gran Premio de Austria con un paquete de evoluciones aerodinámico. Aquello fue un punto de inflexión, con un cuarto puesto de Lando Norris, que se confirmó en Silverstone con otro paquete de evoluciones. Desde entonces, el McLaren siempre ha estado en la terna de favoritos en cualquier tipo de circuitos, situación que se espera que siga así en el próximo mundial de 2024.
Un hecho que contrasta con Aston Martin que, desde el inicio de temporada, parecía haber dado con la tecla para hacer un monoplaza competitivo, pero que con el paso del tiempo ha ido yendo hacia atrás, encadenando actuaciones que han lastrado a Fernando Alonso, siendo uno de los últimos coches desde aquel maravilloso segundo puesto en Países Bajos.
La evolución de McLaren, y el descenso a los infiernos de los británicos, se espera que sigan la misma tendencia en un mundial de 2024, con un gran rival para Max Verstappen, que no será Fernando Alonso, a quien ya quitan de las quinielas para ser campeón del mundo. Con ello, los de Woking dejarán, todavía, en más mal lugar a la marca verde. Todo ello, con un Ferrari que ya se postula como contendiente al título.
El nuevo rival de Verstappen está en Ferrari
Y es que desde la victoria en Singapur de Carlos Sainz, donde brilló con luz propia gracias a una gran exhibición de gestión de carrera, son muchas las voces expertas que lo sitúan como el gran rival de Verstappen en la lucha por el mundial del año que viene. Tanto es así que desde il cavallino rampante parecen haberse girado las tornas, y ahora ven al español como campeón del mundo.
"Está en un momento de forma y de confianza brutal. Las dos últimas carreras, el podio de Monza y la victoria de Singapur, fueron sumamente difíciles, pero es que hizo todo el fin de semana a un nivel extremadamente alto. Si tú me dices que le ponga una nota a estas dos citas, le pongo un diez", dijo Marc Gené, embajador de Ferrari sobre su piloto, en una entrevista a Marca.
De hecho, el catalán está tan convencido del nivel del madrileño que lo sitúa como campeón del mundo: "Es muy rápido, comete poquísimos errores, es muy inteligente y técnicamente es muy completo. Tiene todo para ser campeón del mundo", y es que Gené está convencido de que será él quien devuelva a Ferrari a los Olimpos, volviéndolos a convertir en campeones del mundo. Unas declaraciones de las que se puede extraer que la marca italiana renovará a Sainz.