Para Xavi Hernández y sus ideas de juego, los extremos del Barça tienen que ser futbolistas muy rápidos y desequilibrantes. Quien aglutina a la perfección estas características es Ousmane Dembélé, pero su continuidad en Barcelona parece cada vez más lejos. Además, Joan Laporta está muy cerca de anunciar la renovación de Sergi Roberto, único futbolista aparte del francés, cuyo contrato caduca el próximo 30 de junio.
Ferran Torres, una respuesta que crea muchas preguntas
Al llegar al banquillo del Camp Nou en el mes de noviembre, Xavi Hernández tenía varias demandas de cara al mercado de fichajes. En este sentido, la ventana de traspasos del mes de enero fue un gran punto de partida para el técnico de Terrassa, ya que llegaron futbolistas que han acabado siendo trascendentales como Pierre-Emerick Aubameyang, o deseos expresos como Ferran Torres o Adama Traoré.
El gabonés fue todo un negocio redondo. Llegando al club a coste cero, y en pocos meses, consagrándose como máximo goleador del equipo junto a Memphis Depay. En el caso de Adama, su retorno al Barça ha sido gris. A la sombra de Dembélé, no ha podido dar continuidad a la brillantez que mostró en su debut ante el Atlético de Madrid. Con respecto a Ferran Torres, Xavi esperaba encontrar en él la respuesta a algunas carencias de la plantilla, pero no ha dejado de ser una respuesta que crea muchas preguntas.
La presencia de Ferran Torres imposibilita un fichaje clave de Joan Laporta
Ferran fue la gran inversión del mes de enero. El Barça invirtió ni más ni menos que 55 millones de euros por él, por lo cual, las expectativas eran muy altas desde un principio. De hecho, durante sus primeros partidos con la camiseta del Barça, las cumplió. No obstante, el tiempo acabó haciendo que el ex del Manchester City sucumbiera a la presión y cayera en mala dinámica.
Sea como sea, Ferran era una demanda expresa de Xavi, pero según Sport, Joan Laporta prefería invertir en el futuro de Brasil, Antony Santos. La operación hubiera sido parecida, ya que el Ajax hubiera pedido unos 45 millones de euros por su talento más brillante. Ambos futbolistas son de la generación del 2000. El uno es titular absoluto con la selección española, mientras que el otro varía con Raphinha en la selección brasileña. Sin embargo, el Barça se decantó por el valenciano y Antony, quien había sido entrenado por Erik Ten Hag en el Amsterdam Arena, está muy cerca de fichar por el Manchester United.
Sería ventajista decir que Antony hubiera sido mejor inversión para el Barça, pero lo que está claro es que Ferran Torres tendrá que demostrar cosas si quiere librarse de la mala imagen que está cultivando en el aficionado barcelonista más impaciente.
Imatge principal: Ferran Torres, durante un partido con el Barça / Europa Press