El Barça ha decidido que vale la pena seguir buscando fórmulas para renovar a Araujo y Gavi. Está costando más de lo esperado, pero ambos son jugadores que deben ser importantes en el futuro de la entidad, por lo que hay que seguir intentándolo, cueste lo que cueste. El gran problema es que los representantes, especialmente los de Araujo, saben lo que cobra Ferran Torres y lo que cobrarán Kessié y Christensen, lo que está dificultando muchísimo las cosas.

Ronald Araujo quiere seguir en el Barça, pero no entiende que a él se le diga que no hay dinero para aumentarle la oferta de renovación y, al mismo tiempo, el club no tenga problemas en poner encima de la mesa ofertas muchísimo más altas. La guerra fría, pues, no ha hecho más que empezar, pues en el entorno de Ferran Torres no ha gustado que se le esté usando para intentar una mejora salarial.

Araujo, luchando un balón junto a Ferran Torres / EFE

Araujo quiere cobrar como Ferran Torres

El Barça le ha explicado al entorno del jugador que cada operación es un mundo, por lo que no son comparables. Ferran Torres, para empezar, es delantero, una posición en la que se cobra más. En el caso de Kessié y de Christensen, ambos llegan con la carta de libertad bajo el brazo, por lo que parte del salario se debe a la prima de fichaje. En este último caso, Araujo ha respondido que en ese caso él también esperará a finalizar su contrato y entonces firmará la renovación, con la pertinente prima.

Todos estos temas son propios de unas negociaciones en las que el club tiene todas las de perder, pues el jugador tiene muchas ofertas encima de la mesa, mientras que el Barça necesita renovar, pues encontrar en el mercado un futbolista del mismo nivel le saldrá mucho más caro.

Ilaix no quiso renovar y ahora se arrepiente / Europa Press

El ejemplo de Ilaix, sobre la mesa

A pesar de todos los problemas que están surgiendo, en el Barça creen que todo acabará bien. El 0-4 en el Santiago Bernabéu, por ejemplo, ha sido la demostración de que el proyecto de Xavi Hernández va por el buen camino, que el Barça será competitivo la temporada que viene, lo que aumenta las posibilidades de que Araujo y Gavi quieran seguir. En una situación de crisis lo fácil es que los jugadores prefirieran cambiar de aires, pero con las expectativas creciendo sin parar, una salida puede acabar siendo un grave error.

En este sentido, el Barça está usando el ejemplo de Ilaix Moriba, que en verano se negó a renovar porque tenía una gran oferta del Red Bull Leipzig. No tardó en darse cuenta de que había cometido un gravísimo error. De no jugar en Alemania pasó a ir cedido al Valencia, donde tampoco juega. El error es histórico y no tiene marcha atrás.

 

Imagen principal: Ferran Torres, en el partido de la Supercopa de España contra el Real Madrid / FCB