El Barça ha recuperado la esperanza con poder fichar a Erling Braut Haaland, después de las declaraciones de Mino Raiola, en las que ha asegurado que los azulgranas tienen posibilidades. De hecho, solo ha dado cuatro nombres, entre los que también se encuentran Manchester City, Real Madrid y Bayern de Múnich. Joan Laporta está convencido de que conseguirá llevarse al astro del Borussia Dortmund, y ya se está moviendo para ello.
Obviamente, no será sencillo ni barato, y habrá que hacer un gran esfuerzo, tanto a nivel económico como deportivo. Para ello, será necesario sacrificar a varios jugadores, y ya hay siete víctimas, que tendrán que marcharse, para hacer hueco al ganador del Golden Boy de 2020. Los primeros serán Memphis Depay, Martin Braithwaite y Luuk de Jong, que se quedarán sin espacio en la plantilla, ya que está previsto que el noruego lo juegue absolutamente todo.
Eso hará que tengan que aceptar un papel residual, una cosa que el ex del Olympique de Lyon no está dispuesto a hacer. Y, viendo que su contrato finaliza en 2023, en el Camp Nou se debaten sobre la posibilidad de hacer caja con su salida. En el caso del otro holandés, al que Xavi Hernández solo ha utilizado en situación de extrema necesidad, su futuro lleva decidido desde hace meses. Está a préstamo por el Sevilla, y se irá cuando acabe la cesión.
El danés, por su parte, puede ser usado para conseguir dinero, aunque tampoco está del todo descartado que se quede, para ser suplente. El problema es que el Barça quiere recuperar parte de los 20 millones de euros que pagaron en su momento. Los siguientes dos nombres en la lista de víctimas son los de Frenkie de Jong y Marc-André ter Stegen, que se irían a cambio de una cantidad muy importante, que sería el que utilizarían para pagar el fichaje de Haaland.
Ambos han sido señalados por su bajo rendimiento, y el técnico de Terrassa está realmente disgustado con ellos, por eso, no se opondría a su marcha. Además, tienen un salario muy elevado.
Sergio Busquets y Gerard Piqué, las dos bajas más sensibles
Pero no hay duda de que las marchas más delicadas serían las de Gerard Piqué y Sergio Busquets. Los dos son leyendas del Barça, y son los únicos supervivientes que quedan en la plantilla de la mejor etapa de la historia de la entidad, junto a un Dani Alves que se retirará en verano, tras volver hace unas semanas.
El central catalán tiene decidido poner punto y final a su carrera profesional, y será un salario menos a pagar. ‘Busi’, por su parte, era intocable para Xavi, pero Laporta quiere convencerle para que se retire, y así no tener que seguir pagando su salario.
Todo, para traer a Haaland.