El Barça necesita reforzar su plantilla para el próximo curso, pero en la gran mayoría de casos, los fichajes serán a coste cero. Más allá del caso Haaland, por quién se podría hacer un esfuerzo e intentar encajar su fichaje pese a la delicada situación económica de la entidad, Joan Laporta va a mirar con lupa cada euro que se gaste.
Christensen, el primero pero no el último
Para el resto de las incorporaciones, la idea de Joan Laporta y de Mateu Alemany es que, siempre que sea posible, se traten de futbolistas que finalicen su contrato con sus clubes y queden libres para no tener que pagar un traspaso por ellos. En ese sentido, parece que quién más cerca está de convertirse en futbolista culé es el central Andreas Christensen, pero no vendrá solo.
Según explicó el diario AS, después del central del Chelsea los siguientes en llegar van a ser Azpilicueta, Kessié y Mazraoui, con especial atención a este último. El lateral marroquí del Ajax tiene decidido no renovar y su representante es Mino Raiola, que también lleva a Haaland, entre muchos otros como Paul Pogba, De Ligt, o el exblaugrana Xavi Simons.
Laporta quiere tener contento al agente para que el delantero noruego del Borussia Dortmund se vista de blaugrana, por lo que la oferta por Mazraoui es firme. Se está hablando de un contrato largo, de cinco temporadas, y a razón de 3,5 millones de euros por temporada, unas condiciones que el lateral diestro va a aceptar.
Las incógnitas del lateral derecho
Con su fichaje, se añade más competencia para el perfil diestro, y aumentan las incógnitas en esa zona del campo. Porque todo apunta a que Dani Alves renovará por una temporada más, pero se hace difícil de imaginar que juegue más allá de 2023.
Para el resto de jugadores que pueden ocupar esa posición, el futuro es incierto. Sergi Roberto acaba contrato y el club no parece dispuesto a ofrecerle una renovación, aunque Xavi ha dicho que le gustaría contar con él cuando se recupere de la lesión. Mingueza podría quedarse con un papel residual, pero no sorprenderá a nadie si se va.
Mientras tanto, Sergiño Dest ha renacido desde la llegada de Xavi Hernández, y aunque hace unos meses era una salida casi segura, ahora no lo es tanto, y posiblemente la decisión se tome desde un punto de vista económico, porque deportivamente se ha demostrado que es un jugador más que aprovechable. Sea como sea, Mazraoui vendrá y luchará por tener un puesto en el 11.