El Real Madrid apuesta claramente por el talento extranjero, como se ha podido ver con Endrick, Vinicius Junior o Rodrygo Goes en los últimos años, pero tampoco descuida a las joyas que destacan en el futbol nacional. Florentino Pérez quiere traer a las mejores promesas que emergen en España, y por ello el verano anterior incorporó a Ferran Quetglás, a Enrique Herrero García, a Noel López, a Álvaro Leiva o a Iker Bravo. Y ahora, se ha anotado otro objetivo.
Desde el Santiago Bernabéu no quieren que se repita otro caso Pedri González u otro caso Pablo Torre, y esperan poder adelantarse al Barça en la subasta por un jugador que empieza a maravillas a todo el planeta con sus destacadas actuaciones. Y es que Alberto Moleiro ha impresionado gracias a su visión de juego, la capacidad de asociación que atesora, y la madurez que tiene pese a tratarse de un chico de solamente 19 años, y que hasta hace poco era juvenil.
Pese a su edad, ya acumula una experiencia muy importante en el futbol profesional, y es un fijo en el primer equipo de la UD Las Palmas. Allí es la gran estrella del equipo que actualmente lidera La Liga SmartBank, y que sueña con regresar a La Liga Santander un lustro después de su descenso, en 2018. Pero el conjunto canario sabe que será prácticamente imposible retener al talentoso atacante otro curso más, y que es muy probable que acabe haciendo las maletas.
Y es que tiene a varias entidades ‘top’ siguiendo sus pasos. Sin ir más lejos, el Madrid ya ha iniciado las gestiones para asegurarse la firma del internacional español sub 21, que tiene una cláusula de rescisión cifrada en 30 millones de euros, si bien puede irse por una cantidad sensiblemente más reducida. Florentino Pérez ha asumido personalmente el control de las negociaciones, aunque por ahora no está teniendo el éxito deseado.
De hecho, ha recibido una noticia pésima, y que le ha comunicado el propio representante de Moleiro.
Moleiro tiene un pacto verbal con el Barça
Al parecer, Moleiro tendría un pacto verbal con el Barça, y habría prometido a Joan Laporta que no estudiará ninguna otra llamada, incluyendo la del Madrid. Confía en que pueda seguir los pasos de Pedri, y acabe poniéndose a las órdenes de Xavi Hernández realmente pronto.
En el Camp Nou confían en poder cerrar este trato cuando finalice el curso, y que se quede cedido en el Estadio de Gran Canaria, si finalmente consiguen ascender.