Hans-Dieter Flick ha llegado al Barça con la intención de liderar una serie importante de cambios, y devolver la ilusión a la afición. Y para ello, espera que Joan Laporta y Deco le faciliten las cosas, y traigan muchos refuerzos galácticos, como los de Joshua Kimmich, Nico Williams y compañía. Aunque primero, será necesario liberar espacio en el vestuario, y dar salida a las piezas que no entran en sus planes. Y ya ha señalado a tres descartes.
Marcos Alonso y Sergi Roberto ya han abandonado el Camp Nou, después de que sus contratos expiraran, y Joao Félix y Joao Cancelo también han dicho adiós al finalizar sus respectivas cesiones. Sergiño Dest, por otra parte, se quedará en el PSV Eindhoven, pero con esto no es suficiente para ‘Hansi’. Y el próximo objetivo será perder de vista para siempre a Oriol Romeu, que ha firmado una campaña decepcionante, y no tendrá una nueva reválida.
Llegó como solución de emergencia para hacer olvidar a Sergio Busquets, siendo una apuesta ‘low cost’. Venía de sorprender a todos con su rendimiento en el Girona, convirtiéndose en una de las revelaciones de la anterior edición de La Liga EA Sports, y tan solo costó cinco millones de euros. Pero como mucha gente advertía, no tenía las condiciones necesarias para poder ser titular, y acabó viéndose relegado al ostracismo por Xavi Hernández.
Flick no quiere saber nada del ‘18’, al cual ya han obligado a iniciar la búsqueda de un nuevo desafío. Y la misma suerte correrá Íñigo Martínez, quien precisamente también aterrizó en el Barça en verano de 2023, aunque en su caso, lo hizo de manera totalmente gratuita, procedente del Athletic Club de Bilbao. Ha tenido más protagonismo, y durante un tramo del curso fue titular habitual, pero se vio eclipsado por la irrupción de Pau Cubarsí.
No se puede decir que haya cumplido con las expectativas, y ha firmado algunas actuaciones desastrosas, que han hecho que el técnico alemán prefiera apostar por los jóvenes Eric García o Mikayil Faye antes que por el vasco, que tendrá que salir.
Pablo Torre tampoco cuenta para Flick
Y, por último, el tercer futbolista que ha sido señalado por Flick y que no tiene presente ni futuro en el Barça es Pablo Torre, que ha estado a préstamo en Montilivi, donde no ha tenido prácticamente continuidad.
Nadie discute que atesora un potencial brutal, y dispone de unas condiciones excelentes. Pero no tiene espacio en la plantilla, y le buscan una nueva cesión, e incluso, un traspaso definitivo.