Hansi Flick ya perfila el once que alineará este sábado en la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid, y todo apunta a que habrá una decisión muy dolorosa para uno de los pesos pesados del vestuario: Ronald Araujo no será titular.
El técnico alemán ha ido dejando pistas en los últimos partidos. Contra el Mallorca, Araujo jugó de inicio, pero no convenció. Aunque no cometió errores groseros, tampoco mostró la contundencia ni el liderazgo que se espera de él en citas importantes. Y en un contexto en el que cada detalle cuenta, Flick parece haber tomado una decisión definitiva.
La nueva jerarquía en defensa
Araujo, que durante las últimas temporadas fue indiscutible en el eje de la zaga, ha visto cómo su estatus se ha ido debilitando. El crecimiento de Pau Cubarsí, junto al gran rendimiento de Iñigo Martínez, ha cambiado por completo el panorama defensivo en el Barça.

Cubarsí se ha ganado un sitio a base de actuaciones impecables. Su madurez, serenidad con el balón y capacidad para anticiparse le han convertido en una de las grandes revelaciones del año. Por su parte, Iñigo aporta experiencia, solidez y una salida de balón precisa que Flick valora muchísimo para partidos de máxima exigencia.
Araujo, en cambio, ha tenido actuaciones irregulares y algunos errores de bulto en citas clave que no han pasado desapercibidos para el cuerpo técnico.
Un golpe anímico importante
Quedarse fuera del once en un partido tan importante como una final contra el Real Madrid será, sin duda, un palo muy duro para Araujo. El uruguayo siempre ha demostrado compromiso, liderazgo y entrega total por el club, incluso jugando infiltrado en momentos de necesidad.
Esta decisión puede afectar anímicamente al central, que además ya ha sido relacionado en las últimas semanas con algunos rumores de salida. Equipos como el Manchester United o el Bayern Múnich han mostrado interés, y una suplencia en una final tan relevante podría reavivar el debate sobre su futuro.
Flick apuesta por meritocracia
Desde su llegada, Flick ha dejado claro que no se casa con nadie. Su gestión se basa en el rendimiento actual, no en el nombre o el pasado de los jugadores. Y esa filosofía se está reflejando en decisiones como la de dejar a Araujo en el banquillo.

El alemán quiere a los jugadores más en forma sobre el césped, y en estos momentos considera que Cubarsí e Iñigo ofrecen mayores garantías. Además, ambos se entienden bien como pareja y han rendido en escenarios de máxima tensión.
Araujo tendrá su momento
Pese a todo, Flick sigue considerando a Araujo una pieza importante. En partidos como el de Champions ante el Inter de Milán, donde el físico y el juego aéreo pueden ser claves, podría tener su oportunidad. Además, su carácter competitivo le convierte en un recurso útil desde el banquillo para cerrar partidos o reforzar la defensa.
De momento, sin embargo, el mensaje es claro: en el once de gala de Flick para la final no está Ronald Araujo. Un golpe difícil de digerir para el central uruguayo… y un reflejo de que en este Barça nadie tiene el puesto asegurado.