Un jugador que hasta la pasada campaña defendía los colores del Barça está viviendo una auténtica pesadilla. Porque Marcos Alonso se quedó sin trabajo el pasado 30 de junio, y no recibió ninguna oferta de renovación, a diferencia del año anterior. Xavi Hernández fue su gran valedor, y el responsable de su aterrizaje, y obligó a Joan Laporta a cerrar la ampliación de su vínculo el anterior verano. Pero la última campaña fue totalmente decepcionante.
Las constantes lesiones que acumuló provocaron que se perdiera casi todo el curso, y cuando estuvo sobre el terreno de juego, firmó unas actuaciones decepcionantes. Ni siquiera la grave lesión de Alejandro Balde le ayudó a tener más regularidad, y se vio superado por Héctor Fort o por Joao Cancelo, a pesar de que ambos son diestros. En el Camp Nou tenían decidido que no retendrían al internacional español, y Hans-Dieter Flick apoyó esta idea.
Prefería apostar por el regreso de Álex Valle después de su cesión a la UD Levante o por algún talento del filial, como Gerard Martín, antes que quedarse con el ex del Sunderland, del Bolton Wanderers, de la Fiorentina, del Chelsea y del Real Madrid. Y fue la primera baja confirmada para esta temporada. Pero a priori, confiaba en no tener demasiados problemas para conseguir encontrar un nuevo desafío, y fue vinculado a muchos equipos.
En especial, al Atlético de Madrid, donde Diego Pablo Simeone valoraba muy positivamente su experiencia y su polivalencia. No obstante, han acabado olvidándose de Alonso, quien tampoco tiene propuestas de Arabia Saudí, Qatar, Japón ni Estados Unidos. Y la realidad es que a día de hoy, y más de un mes después de haber dejado el Barça, no tiene club. Un caso preocupante, en especial considerando que la nueva campaña comienza en una semana.
Flick no ha tenido compasión con Marcos, que a sus 33 años está en un momento crítico. Y pensar que en su momento llegó a ser considerado como el mejor lateral izquierdo de la Premier League…
¿Es posible la retirada de Marcos Alonso?
De momento, la realidad es que Marcos sigue sin encontrar un equipo, y parece que no existe interés por su contratación. Y esto puede provocar que se acabe decantando por colgar las botas, y retirarse definitivamente del fútbol profesional, después de una trayectoria de más de una década en la élite.
Al menos podrá presumir de tener un palmarés increíble, y de haber jugado en muchos equipos top.