Hans-Dieter Flick tuvo unas primeras semanas de ensueño en el Barça, y rápidamente se convirtió en un ídolo para la afición. Mejoró notablemente los resultados que habían obtenido en la campaña anterior con Xavi Hernández, y en especial las sensaciones, pasando de ser un equipo aburrido a proponer un estilo de juego muy alegre y ofensivo, y realizando algunos partidos para la historia, como las goleadas contra el Bayern de Múnich y el Real Madrid.
Todo parecía ser felicidad y euforia, pero esta sensación no tardó en desaparecer y comenzaron a llegar las primeras dudas después de la derrota, justa e inesperada, frente a la Real Sociedad. Desde ese momento no se ha vuelto a ver la versión tan efectiva y demoledora que la entidad azulgrana había demostrado a principio de temporada, y esto ha provocado que puedan perder el liderato de La Liga EA Sports, dejándose muchos puntos por el camino.
Han perdido partidos tan dolorosos como contra el Leganés y la UD Las Palmas, jugando como locales, y se han dejado puntos en otros choques que tenían prácticamente sentenciados, frente al Celta de Vigo y al Betis. Una cosa que ha permitido que el Real Madrid y el Atlético de Madrid se acerquen en la clasificación, y puedan superarlos, en caso de ganar el partido que tienen pendiente. Y en el vestuario del Camp Nou comienzan a tener dudas con el método de ‘Hansi’.
Para empezar, porque no está acertando a la hora de hacer rotaciones. Siempre apuesta por los mismos futbolistas, aunque muchos acumulen un evidente cansancio y mucha sobrecarga de minutos, como es el caso de Raphinha Dias, de Dani Olmo, de Jules Koundé o de Íñigo Martínez, que ya han tenido algunos problemas físicos derivados de la fatiga. Y tampoco ha acertado a la hora de dar oportunidades a futbolistas que claramente no estaban preparados.
Gerard Martín es el ejemplo más evidente de todos, y nadie en el Barça se explica por qué le ha dado tanto protagonismo, cuando claramente no tiene el nivel necesario, pero también se puede decir lo mismo de Eric García o de Ferran Torres.
Los cambios, el talón de Aquiles de Flick
Y otro detalle que mucha gente le reprocha a Flick, incluidos sus propios pupilos, son los cambios que realiza, que muchas veces son muy difíciles de entender. Como, por ejemplo, sustituir a Robert Lewandowski o a Lamine Yamal cuando necesitan remontar y marcar goles, o introducir a futbolistas que no tienen la capacidad de cambiar la dinámica de los partidos.
Es muy pronto para cuestionar al ex del Bayern o del TSG Hoffenheim, pero está claro que necesita encontrar una solución a los problemas que existen.