Ha habido mil giros de guion y cambios en el banquillo, pero finalmente Xavi Hernández se irá del Barça. El club lo anunció ayer oficialmente, cuando no había pasado ni un mes desde que se le ratificase en el cargo. A falta de oficialidad, el fichaje de Hansi Flick ya se da por hecho, una vez se acabe la Liga este domingo, con el último partido ante el Sevilla.
A partir de aquí, la planificación deportiva vuelve a la casilla de salida. Todo lo que Xavi y Deco habían pactado queda en papel mojado, ya que los planes del alemán pueden ser totalmente distintos a los del técnico catalán. Una de las prioridades de Joan Laporta es saber quién saldrá, por ello ya le ha trasladado a Flick la situación de muchos jugadores para que dé el visto bueno. Algunos pueden tener una segunda oportunidad con el cambio de entrenador. Otros no tendrán la misma suerte.
Joao Félix, en la rampa de salida
Uno de ellos es Joao Félix, que ha vivido una temporada convulsa en el Barça. Después de llegar cedido por el Atlético de Madrid, sin la aprobación inicial de Xavi, el portugués parecía que podía convertirse en una pieza importante. Su irregularidad y falta de actitud en algunos partidos lo condenó al banquillo, donde ha estado en este tramo final de curso.
Con la continuidad de Xavi, el futuro de Joao Félix no pasaba por el Barça, a pesar de la predilección que Laporta y Deco tenían por él. Con la llegada de Flick la situación no ha cambiado, y el luso tendrá que buscarse un nuevo destino. Es por esto que su agente, Jorge Mendes, ha empezado a mover al jugador en el mercado y ya maneja dos ofertas para cuando acabe su cesión, según el periodista Rubén Uría.
El Atlético no cambia sus planes
A pesar de los movimientos que pueda hacer Mendes, el futuro de Joao Félix sigue dependiendo del Atlético de Madrid. Y Enrique Cerezo se mantiene firme en su idea de pedir una gran cifra para hacer posible su traspaso. El club aprueba las acciones del agente luso, pero la avisa de que tendrá que traer una oferta que pueda asumir el coste del jugador.
A la espera de esta propuesta, la posibilidad de que el delantero vuelva a verse las caras con el Cholo Simeone, con quien tiene una mala relación, se va acercando. Si el jugador no se ha buscado un nuevo equipo para el inicio de la pretemporada, será llamado a entrenar como todos sus compañeros. Habrá que ver cómo el Atlético resuelve una situación que, sin duda, puede traerle muchos dolores de cabeza. El Barça, por su parte, observa el problema desde la distancia, sabiendo que no prolongará la cesión.