Hansi Flick tiene una gran sorpresa preparada para el crucial enfrentamiento entre el Barcelona y el Bayern de Múnich en la Champions League este miércoles en Montjuic. El técnico alemán, que conoce muy bien al conjunto bávaro tras haberlos dirigido con éxito en el pasado, está ultimando los detalles del once inicial. El objetivo es claro: alinear a los jugadores más en forma para asegurar una victoria ante un rival tan temido como el Bayern.
La gran incógnita de Flick radica en el centro del campo. Aunque ha habido diversas combinaciones a lo largo de la temporada, todo apunta a que el técnico apostará por una medular compuesta por Marc Casadó, Pedri y Dani Olmo. Esta elección es especialmente sorprendente en el caso de Olmo, quien, tras superar una lesión, parece estar listo para volver directo al once titular. A pesar de no haber disputado ni un solo minuto en la victoria ante el Sevilla, su conocimiento del Bayern y su polivalencia podrían ser claves en el planteamiento de Flick.
La posible titularidad de Dani Olmo también estaría condicionada por la baja de Eric García, lo que lleva a Flick a buscar opciones que puedan aportar tanto equilibrio defensivo como creatividad ofensiva en un partido de máxima exigencia. La versatilidad del jugador español, que puede desempeñarse en diversas posiciones del centro del campo y ataque, hace que Flick confíe en su impacto inmediato para este encuentro tan decisivo.
Sin embargo, esta elección también implica una sorpresa importante: el ‘banquillazo’ de Frenkie de Jong. El neerlandés, que hasta hace poco era indiscutible en el centro del campo azulgrana, parece no estar en los planes de Flick para este choque. De hecho, de Jong no jugó ni un solo minuto ante el Sevilla debido a problemas físicos, y el técnico alemán sigue sin estar convencido de que esté al 100% para un partido de la magnitud del que enfrentará al Bayern.
Además, Flick tiene sus dudas sobre cómo encajar a Frenkie de Jong en su esquema. El centrocampista ha mostrado destellos de calidad, pero las lesiones han sido una constante esta temporada, lo que ha limitado su continuidad y rendimiento. En un partido de tanta exigencia física y táctica como el del Bayern, Flick parece preferir a jugadores que estén en plena forma.
Con esta alineación en mente, Flick parece dispuesto a apostar por la juventud y la frescura de Casadó junto a la calidad de Pedri y Olmo, mientras que de Jong verá el partido desde el banquillo. Un movimiento audaz que podría marcar la diferencia en uno de los duelos más esperados de la temporada.