Hans-Dieter Flick tan solo ha necesitado de unos pocos meses en el Barça para convertirse en uno de los entrenadores más respetados y admirados que han tenido en toda la historia. Todavía no ha conquistado ningún título importante, únicamente la Supercopa de España, pero ya cuenta con el apoyo total por parte de la afición, y también de la directiva, donde están convencidos de que no pudieron tomar una mejor decisión.
Ni siquiera Pep Guardiola y Luis Enrique eran tan idolatrados como él, y necesitaron conquistar el triplete para llegar a ser reconocidos en el Camp Nou, donde no solamente basta con ganar, sino que también exigen jugar bien. Y ‘Hansi’ ha cumplido a la perfección, pues ha logrado hacer ambas cosas, y ha seguido apostando por los jóvenes talentos de la cantera, una cosa que también es fundamental, como demuestra el hecho de que haya dado la oportunidad de debutar a Marc Bernal, Andrés Cuenca, Sergi Domínguez o Toni Fernández.
Y ha rescatado la mejor versión de cracks como Jules Koundé, Alejandro Balde, Íñigo Martínez, Raphinha Dias, Frenkie de Jong o Robert Lewandowski, que la campaña anterior no cumplieron con las expectativas, e incluso estuvieron cerca de salir. Y lo que tiene más mérito es que ha conseguido todo esto sin la necesidad de incorporar nuevos fichajes, ni gastar dinero, pues la única contratación que llegó el verano anterior fue la de Dani Olmo.
Las comparaciones siempre son odiosas, pero ha mejorado considerablemente el trabajo de su antecesor en el cargo, Xavi Hernández, y mucha gente ya empieza a debatir si el Barça de Flick es el mejor de la historia, pues no solamente han exhibido una solidez defensiva brutal, sino que son letales de cara a portería, y tienen unas cifras asombrosas. Y Joan Laporta y Deco quieren asegurarse la continuidad de su proyecto durante muchos años más.
Están encantados con el exentrenador del Bayern de Múnich o del TSG Hoffenheim, que firmó por dos años, es decir, hasta 2026. Pero la idea es ampliar este vínculo, como mínimo, hasta 2028.
Flick no quiere comprometerse a largo plazo
Sin embargo, Flick ha rechazado esta propuesta. Aunque él y su familia aseguran que están muy contentos en España, la primera aventura fuera de su país natal, su deseo es la de renovar año tras año, y no comprometerse a largo plazo.
Una estrategia similar a la de Guardiola en su momento, cuando dirigía al Barça.