Carlo Ancelotti lo ha intentado hasta el último momento, pero Florentino Pérez ha sido inflexible. Tras la traición de Kylian Mbappé y la salida de Jovic, el entrenador italiano le hizo saber a Florentino que el Real Madrid necesitaba un delantero centro suplente, un jugador que pudiera darle descansos a Karim Benzema. El gran problema es que el delantero francés, estrella absoluta en estos momentos del club blanco y máximo favorito para ganar el Balón de Oro, le dijo al presidente que no quería tener un rival en la delantera.
Y Florentino Pérez le ha hecho caso. Ancelotti lo ha intentado, hasta el punto de no darle minutos a Hazard y a Marco Asensio como falsos 9, como se dijo durante la pretemporada. La necesidad de fichar a otro delantero parecía obvia y desde el entorno del Real Madrid se ha dicho por activa y por pasiva, sin éxito. Ancelotti, de hecho, ya ha dejado caer que el suplente será Rodrygo, que teóricamente tenía que ser el extremo derecho.
Ancelotti se queda sin delantero
A pesar de las negativas de Florentino Pérez, Ancelotti tenía la esperanza que en los últimos días del mercado, ante la avalancha de propuestas de jugadores que buscan cambiar de aires, el presidente del Real Madrid cambiaría de opinión. Se especuló con los fichajes de Mauro Icardi, Edinson Cavani, Dzeko y Raúl de Tomás, pero todos los nombres fueron cayendo, uno tras otro, sin que el Madrid moviera ni un dedo.
Finalmente, pues, Karim Benzema se ha salido con la suya y esta temporada será el único delantero centro del Real Madrid, que como el resto de grandes equipos tendrá que afrontar un otoño cargadísimo de partidos por la disputa del Mundial de Qatar. Nadie del Madrid se quiere imaginar qué puede suceder si el francés se lesiona.
No quieren otro Jovic
Además de por la petición de Benzema, el Real Madrid no ha fichado a ningún delantero porque no quiere que se repita un nuevo caso Jovic, por el que el club blanco pagó 60 millones. El club blanco solo piensa fichar a delanteros contrastados, que aseguren goles, grandes estrellas contrastadas. Si no es posible, no vendrá nadie. El elegido era Mbappé y si fallaba el francés Haaland. El primero traicionó al Madrid y el segundo optó por el Manchester City.
Sin los dos cromos del mercado y sin tiempo para ir a por Lewandowski, que ya se había decantado por el Barça, el Real Madrid se quedó sin delantero top, por lo que la carpeta del suplente de Benzema quedó cerrada hasta, al menos, el próximo invierno.