A pesar de tener solo 17 años, Iker Bravo ya sabe lo que es tomar una decisión drástica e inesperada. El actual delantero del Bayer Leverkusen, que en enero llegará a la mayoría de edad, ya dejó a todo el mundo helado hace dos años, cuando en los últimos días de mercado rechazó la oferta de renovación del Barça, club en el que llevaba 10 años, para irse al Leverkusen. "Todo el mundo se sorprendió porque fue tres días antes de empezar la pretemporada con el Barça. Fue una decisión difícil, pero como el Barça está en un periodo de transición, de cambios, no era el momento de dar los pasos allí. Y decidí, por el proyecto deportivo y lo que me ofrecían, irme a Alemania. Está saliendo bastante bien. He estado 10 años en el Barça y nunca le voy a cerrar las puertas", afirmó el delantero en una entrevista al diario Marca.
Y ahora, Iker Bravo está a punto de volverlo a hacer. El delantero lleva semanas negociando con el Atlético de Madrid, que lo quiere para rejuvenecer su zona ofensiva, pero ahora está pensando en cambiar de opinión, pues el Real Madrid se ha puesto en contacto con su entorno. A iker Bravo parece importarle poco dejar a un lado al Atlético para irse al Real Madrid, con el añadido de que, al tratarse de un jugador con ADN Barça, pues estuvo una década en la Masia, su posible paso al club blanco generará una gran controversia.
El Madrid, en la puja con el Atlético por Iker Bravo
Iker Bravo no está incómodo en Alemania, pero no le cierra la puerta a volver al fútbol español. Por un lado, en el primer equipo tiene por delante a Schick, Azmoun y Hlozek, por lo que ya sabe que seguirá formando parte del equipo filial y que tendrá pocas oportunidades para acumular experiencia con el primer equipo. Aún y así, el Leverkusen no lo piensa poner fácil, puesto que no quiere traspasar un joven talento del nivel de Iker Bravo. El club que lo quiera deberá poner una importante suma de dinero encima de la mesa, por lo que el Real Madrid deberá decidir si hace la gran apuesta o si se espera.
En el caso de que el Madrid lograra hacerse con sus servicios, el plan sería cederlo a algún equipo del fútbol español, de Primera o Segunda División, para que el jugador cogiera experiencia de cara a un futuro no muy lejano. La idea convence a Iker Bravo, que en un par de años podría estar marcando goles en el Santiago Bernabéu.
El Barça no quiere a Iker Bravo
La intromisión del Real Madrid en las negociaciones del Atlético de Madrid con Iker Bravo son una muestra más de que el pacto de no agresión entre ambos clubes se ha desvanecido. Los dos equipos se acusan mutuamente de haber intentado fichar jugadores de las categorías inferiores del rival ciudadano, hasta el punto de que el pacto de no agresión ya no está vigente.
El club que no piensa entrar en la puja es el Barça, a pesar de que Iker Bravo tiene un excelente futuro por delante. La entidad blaugrana no piensa apostar por un futbolista capaz de irse por la puerta de tras, prácticamente sin avisar y después de haber recibido 10 años de formación.