El Real Madrid sigue disfrutando de un final de temporada tranquilo mientras espera a la final de la Champions League. A pesar del último empate contra el Villarreal (4-4), los de Carlo Ancelotti siguen manteniendo un ritmo demoledor en Liga, lo que anticipa que el Borussia Dortmund difícilmente será rival para los blancos. Y es que la gran distancia del Madrid con respecto al Barça le ha permitido cantar el alirón con muchas jornadas de margen y, por tanto, dar descanso a los titulares.
Esto también ha supuesto, como consecuencia, una nueva oportunidad para los suplentes de tener minutos con regularidad e intentar convencer a su entrenador. Algunos, como Eder Militao, han demostrado que no están preparados para ser titulares indiscutibles después de la lesión. Otros, como Arda Güler, se han reivindicado y piden un sitio en el once.
Arda Güler consigue brillar en el Madrid
El turco viene de lograr un doblete contra el Villarreal. No solo eso, sino que con sus dos goles ya suma 4 dianas en los últimos tres partidos, para un total de 6 en toda la Liga. Con su gran habilidad con el balón en los pies, el mediapunta se ha ganado la confianza de Ancelotti de cara a la próxima temporada, donde se espera que pueda tener más minutos.
Y es que el curso no empezó bien para él. El Fenerbahçe aceptó su salida a cambio de 20 millones de euros por parte del Madrid, el cual se anticipó a los planes del Barça de incorporarle. Después de cuatro meses en los que encadenó varias lesiones, más de un madridista empezó a perder la fe en él. No hizo su debut hasta el 6 de enero, contra la Arandina en Copa del Rey. Desde entonces, fue sumando minutos poco a poco, sin tampoco tener gran presencia en el equipo. Hasta que el Madrid sentenció la Liga contra el Barça, el pasado 21 de abril. Desde entonces, Güler solo ha sido suplente en uno de los siguientes cinco partidos.
El Barça lamenta su pérdida
Los problemas que tuvo el turco para debutar despertaron la mofa de los culés, que consideraron su fichaje como un fracaso de Florentino Pérez. Sin embargo, el presidente blanco es el que ríe ahora, viendo como su apuesta triunfa, mientras que Vitor Roque parece estar con un pie fuera del Barça después de 6 meses.
Ambos clubes estuvieron peleando por el fichaje de Arda Güler. Por un momento, pareció que Joan Laporta lo tenía todo hecho para traerlo a Barcelona, pero Florentino irrumpió a última hora para convencer al jugador con una buena prima de fichaje y asegurar su llegada por delante del máximo rival. Ahora, Deco puede lamentar no haber hecho ese esfuerzo por el centrocampista.