Ni siquiera la lesión de Karim Benzema ha trastocado los planes de Florentino Pérez con un jugador del Real Madrid. Porque, aunque el francés esté ausente durante las próximas semanas, ha seguido presionando a Carlo Ancelotti para dejar en el banquillo a Mariano Díaz, y no levantarle el castigo. Y es que el enfado que hay con él es enorme, después de negarse a cambiar de aires en el mercado estival, por cuarto año consecutivo. La paciencia se ha agotado.
Zinedine Zidane ya lo intentó en el pasado, pero siempre sin éxito, si bien en ese entonces en el Santiago Bernabéu no se mostraron tan disgustados. Porque tampoco era considerado un futbolista problemático, y entendían que podía ser útil. No obstante, ahora ya están hartos del hispano-dominicano, a quien le han dejado muy claro que no entra en los planes, y que querían ahorrarse su salario, y aprovechar que acaba contrato en 2023 para intentar obtener algo de dinero con su venta.
Lamentablemente, de nuevo todos los intentos que hicieron fueron inútiles. El ‘24’ no aceptó ninguna de las ofertas que le llegaron, y se mantuvo firme en su postura, que es respetar el documento de trabajo que tiene firmado. Así que seguirá otra campaña más, que ya será la última, pues en junio pasará a ser agente libre, y no hay ninguna intención de ofrecerle la renovación. Tampoco se la ha ganado, por culpa de las constantes lesiones que ha tenido.
Hasta el día en el cual se marche, Florentino Pérez quiere que Mariano no juegue ni un solo minuto. Ese es el castigo que tienen en mente para el ex del Olympique de Lyon o del Espanyol, que tendrá que ver todos los partidos desde el banquillo o desde la grada. Y Ancelotti está dispuesto a ello, por mucho que, a priori, sea el sustituto natural de Benzema. Pero antes apostará por reconvertir a Eden Hazard, a Marco Asensio o a Rodrygo Goes.
Así que, salvo sorpresa mayúscula, y prácticamente un milagro, Díaz no volverá a enfundarse la elástica del Madrid hasta el día de su despedida.
Mariano obstaculizó la llegada de un nuevo delantero
Además de todo lo mencionado previamente, Mariano también fue el principal culpable de que no aterrizara otro delantero. Porque para que eso ocurriera era fundamental que hiciera las maletas, y dejara un espacio en la plantilla que hubiese sido ocupado por un nuevo fichaje.
Díaz ha sido declarado ‘persona non grata’ en el Madrid por Florentino Pérez, y la afición también se ha puesto en su contra.
No cabe duda de que se equivocó negándose a marcharse.