El Real Alcaraz de Sevilla, el palacio real en uso más antiguo de Europa, acogerá la noche de este viernes la cena oficial de la previa de la gran final de la Copa del Rey. El encuentro ha sido organizado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), con Rafael Louzán al frente, y están invitados los máximos representantes del Barça y del Real Madrid.
Joan Laporta acudirá, pero no hará lo mismo Florentino Pérez, que tal y como ha adelantado OK Diario, ha decidido plantar a la RFEF y al Barça. En su lugar, en representación del Real Madrid, irán a la cena José Ángel Sánchez, director general del club blanco y mano derecha de Florentino Pérez, y Emilio Butragueño, director de relaciones institucionales del Real Madrid. Hay que recordar que el presidente blanco ya no acudió a la cena que la Federación organizó el pasado mes de enero en Yeda, antes de la final de la Supercopa de España.

Una relación que no atraviesa su mejor momento
No es ningún secreto que Florentino Pérez lleva tiempo molesto con la RFEF, por cómo está organizado el Comité Técnico de Árbitros (CTA), empezando por quién ocupa el cargo de presidente, Medina Cantalejo. El punto culminante fue la durísima carta que el Real Madrid envió a la RFEF después de la polémica por la no expulsión de Romero por una dura entrada a Mbappé en el Espanyol-Real Madrid.
Ya antes, Florentino Pérez había plantado a Joan Laporta, molesto por las duras acusaciones de Miquel Camps, directivo del Barça, contra Vinícius. En esta ocasión, sin embargo, el motivo de su ausencia para estar más vinculado con la RFEF.

La previa, marcada por la polémica con los árbitros
No hay que olvidar que la previa de la final está siendo marcada por la polémica arbitral, después de que De Burgos Bengoetxea haya roto a llorar en la rueda de prensa previa, al ser preguntado por el duro vídeo que le ha dedicado Real Madrid TV. Más dura ha sido la respuesta de González Fuertes, el designado para estar en la sala VOR, que ha insinuado que los árbitros denunciarán al Real Madrid en un futuro no muy lejano.
Ante esta situación, el Real Madrid ha pedido a la RFEF que se cambien los árbitros de la final, especialmente a González Fuertes, al considerar que después de sus palabras no puede tomar decisiones en este partido. La RFEF, sin embargo, no va a cambiar nada, ya que sería un escándalo. Es muy posible que todo este asunto no haya ayudado a que Florentino Pérez pudiera cambiar de opinión sobre su presencia o no en la cena de gala previa a la gran final.